Encantada de que el Festival de Cine de Sitges la premie con una Máquina del Tiempo, una radiante Maribel Verdú compareció ayer, acompañada por parte del equipo de El asesino de los caprichos, dirigida por Gerardo Herrero, y donde interpreta a una inspectora.

Verdú afirmó que en el cine le han "hecho sufrir mucho, con papeles de mujeres que no pueden con la vida, o que las matan, pero antes ayudan a todo el mundo, personajes empáticos".