Los cuatro tripulantes de la primera excursión orbital de tres días organizada de forma privada, gestionada por la compañía SpaceX, regresaron el sábado a la Tierra sin incidentes. Durante una retransmisión en directo del aterrizaje, recogida por la cadena CNN, el multimillonario y comandante de la misión, Jared Isaacman, agradeció a la compañía la experiencia.

El vuelo, denominado Inspiration4, despegó el pasado viernes desde el Centro Espacial Kennedy en Florida a bordo de un cohete Falcon 9 y alcanzó una altura en órbita de 585 kilómetros alrededor de tres horas después.Dentro de la cápsula Dragon de la compañía viajaban Isaacman, un magnate de la tecnología que compró la misión, y otros tres ciudadanos estadounidenses sin entrenamiento especializado.

La excursión orbital supone la primera vez que un equipo enteramente compuesto de civiles realizan un viaje al espacio. Este fue el primero de varios vuelos espaciales privados que la compañía de Elon Musk está planeando para los próximos años, y el siguiente está programado para principios de 2022, informó la agencia Bloomberg.

Además de servir como un vuelo de demostración de prueba de concepto, la misión también ha servido para recaudar 200 millones de dólares en donativos para la investigación del cáncer infantil.

Un empresario, un ingeniero, una asistente médica y una educadora experta en ciencias se subieron a bordo de la cápsula. A una velocidad de unos 28.160 kilómetros por hora, la cápsula dio una vuelta al planeta Tierra cada 90 minutos, en el que fue un recorrido de mayor envergadura que los realizados recientemente por los millonarios Richard Branson y Jeff Bezos que también viajaron al espacio. A bordo de naves de sus respectivas compañías espaciales privadas, ambos efectuaron viajes suborbitales a una velocidad tres veces la del sonido que les permitieron experimentar la ingravidez por unos minutos.

En el Inspiration4, el único multimillonario era el comandante Jared Isaacman, de 38 años, fundador y presidente de la firma Shift4 Payments, amante de la aviación y quien financió la travesía espacial de los otros tres tripulantes, con un costo que no se ha dado a conocer. Con él viajaron Hayley Arceneaux, de 29 años, sobreviviente de un cáncer y médica asistente del Hospital de Investigación Infantil St. Jude, quien se convirtió en la persona más joven en volar al espacio, la profesora universitaria Sian Proctor y el ingeniero aeroespacial y veterano de la Fuerza Aérea Chris Sembroski.

Más allá del hito de ser la primera tripulación civil en viajar al espacio, la misión buscaba recaudar 200 millones de dólares para el hospital infantil St. Jude, en Memphis (Tennessee), que atiende especialmente a pacientes con cáncer.