La Audiencia Nacional confirma que Santiago Segura debía pagar casi un millón de euros a Hacienda

Hacienda concluye que intentó “un doble aprovechamiento fiscal de una misma pérdida”

Santiago Segura, de promoción.  | // C. GRANELL

Santiago Segura, de promoción. | // C. GRANELL / Alberto Muñoz

Alberto Muñoz

En pleno boom de la saga Torrente, Santiago Segura y su grupo empresarial llevaron a cabo una serie de operaciones con las que habrían pretendido sortear el pago de cientos de miles de euros a Hacienda. Así se desprende de una investigación de la Delegación Central de Grandes Contribuyentes recogida en una sentencia de la Audiencia Nacional a la que ha tenido acceso El Periódico de España —de Prensa Ibérica, del mismo grupo que LA OPINIÓN— y en la que se detalla cómo, a través de una compleja serie de movimientos contables de su productora Amiguetes dentro de su grupo empresarial, AE William Holding, SL, el productor intentó beneficiarse de un “doble aprovechamiento fiscal de una misma pérdida”. La Agencia Tributaria, sin embargo, siguió todos sus movimientos y dictó una liquidación en 2016 que ha llegado recientemente hasta la Audiencia Nacional, donde se ha desestimado la reclamación de anular una deuda de 827.183 euros que el grupo de empresas de Santiago Segura mantiene con Hacienda. El motivo de esa deuda, explican los magistrados, es la compensación irregular de las bases imponibles negativas de Amiguetes en la declaración del impuesto de sociedades para el periodo 2010-2011.

A esta cantidad se le sumaron en un primer momento dos sanciones impuestas por la Inspección Regional de Madrid por “infracción tributaria grave” y que en total sumaban 719.972 euros, lo que habría hecho ascender el pleito a más de 1,5 millones de euros. Sin embargo, el Tribunal Económico-Administrativo Central dio la razón a la defensa de Segura y anuló ambas multas, aunque no la deuda.

Una decisión que ha mantenido la Audiencia Nacional al estimar que, pese a que la cuestión es “jurídicamente controvertida”, la deuda con Hacienda persiste. El fallo todavía es susceptible de ser revisado por el Tribunal Supremo, y, ante él, como ha explicado María Luisa Gutiérrez, representante de Santiago Segura y CEO de Amiguetes, están “valorando” presentar un recurso de casación.

“Sin cuestionar el contenido de la sentencia, simplemente decir que nosotros siempre actuamos partiendo de que lo que estábamos haciendo estaba hecho correctamente, y, para eso, siempre actuamos guiados por asesores legales de primer nivel”, defiende Gutiérrez. Seguir las maniobras empresariales de Segura durante esa década no es sencillo. El director decidió en 2008 comprar NetJuice, una empresa tecnológica que ofrecía servicios de soporte informático en pleno despertar de internet y que acabó integrándose en la actual Amiguetes en 2009. A pesar de que el proyecto de NetJuice empezó con fuerza, según la documentación judicial, “desde su constitución en 1999 y hasta el año 2008, especialmente en los ejercicios 2000, 2001, 2002 y 2003, NetJuice incurrió en constantes y cuantiosas pérdidas”.