¿Cree que el hombre nunca llegó a salir del todo de la cueva?

Sin duda, pero yo no quiero dar a la caverna una connotación negativa. Hay costumbres que nacieron ahí y permanecen. Cae la noche y buscamos la empatía con los de nuestra tribu, sentirnos parte de algo. Y eso viene de la cueva.

¿Y lo del baile qué tal se le da?

Lo he descubierto ahora. Me crié en una dictadura militar, en un entorno de intelectuales de izquierdas, y bailar no estaba muy bien visto. Y me lo perdí, pero llevo dos años practicándolo más que en toda mi vida. Hay cosas que si no las disfrutas ahora igual ya no llegas a tiempo.

¿Cómo se recuerda de joven?

Rígido de cuerpo y de ideas. Bastante más viejo que ahora. Una de las virtudes de crecer es aprender a conquistar territorios nuevos. Estoy empeñado en eludir la comodidad y el estereotipo que se me había asignado. Provoca desazón y desconcierto, pero merece la pena.

En uno de sus nuevos temas habla de codicia y glamur. ¿Van unidos?

Ser codicioso se ha vuelto glamuroso. La codicia es para muchos una virtud. Quererlo todo no está mal visto, y la fama es un bien más. Es vistoso tenerla.

¿Se puede comprar?

Se puede intentar, pero todo el mundo se empeña en hacernos sentir que somos únicos para vendernos los productos que supuestamente nuestro estatus merece. La exclusividad es un nuevo modo de control económico.

También habla de cómo le rezan los paparazzi a su dios. ¿Es creyente?

Todo el mundo, hasta los sicarios, tiene un dios al que pedirle sus cosas. Los paparazzi, en concreto, que no les falle el disparador (risas).

El secreto de una canción de amor.

La materia prima. Por ejemplo, si estás con tu hija, que ha llenado tu vida de color rosa. Es amor real.

Como titula en su disco, ¿los artistas viven en Universos paralelos?

Viven en su propio universo, que es paralelo al de los demás. Pero no lo tienen en exclusiva. En cuanto a mí, cuando era niño, la maestra siempre le decía a mi madre: "El niño está en la luna". Quizás me habitué. Desde entonces tengo la sensación de que puedo existir en varios sitios a la vez.

¿Cómo desconecta?

Me gusta el surf. Coger olas en Cantabria. Me hace muy feliz.

¿Y qué le amarga la fiesta?

El desprecio hacia la música de los gobiernos, del signo que sean. Toda expresión artística debería estar por encima de los vientos políticos. No es así. Los impuestos as?xian al sector.

Debutó como actor en 'La suerte en tus manos'. ¿Es afortunado?

Sí, pero es más importante que esté en nuestras manos que la suerte en sí. Soy una persona afortunada que tiene algo de suerte y algo de mérito.

¿Repetiría experiencia en el cine?

Sin duda. Siempre que fuera un maravilloso guión como aquel.