El secretario de Estado de Telecomunicaciones, Francisco Ros, puso fin ayer a las jornadas La Ley de Internet 'Ciudad de Málaga', organizado por la Edición Digital de La Opinión de Málaga, la Universidad de Málaga y patrocinado por Irwin Mitchell, y que se ha celebrado el 14 y el 15 de abril en el Rectorado de la UMA.

En su conferencia, Ros se refirió a los principales cambios que se han producido en estos últimos años en la sociedad gracias a los avances tecnológicos; recordó que actualmente internet cuenta con unos 2.000 millones de usuarios, "unos internautas que además son productores de información, tienen herramientas para ello. Un simple móvil es a la vez una cámara de fotos, un navegador de internet o una herramienta para comunicarse a través de redes sociales", añadió.

"La generación de información supera nuestra actual capacidad de almacenamiento", continuó. "De hecho se cifra un déficit de 900 petabytes [el equivalente a casi 3 billones y medio de canciones en formato mp3] de almacenamiento respecto a la información que se produce", detalló el secretario de Estado. "Facebook, por ejemplo, cuenta con más de 40 millones de fotos, y para el iPhone se han desarrollado en dos años más de 140.000 aplicaciones".

"Equilibrio" entre derechos e intereses

Ros cree que "regular internet es muy difícil". "Cualquier normativa que se hubiera redactado hace sólo cuatro años estaría ya obsoleta por el impacto de las redes sociales", dijo. También hizo hincapié en la sensibilización de los usuarios de la Red, "menor" que en la ´vida real´ ante los delitos. "Nadie acepta que uno tenga armas en casa o pornografía infantil, pero en internet nos cuesta más trabajo combatirlo".

El secretario de Estado, que no mencionó la ´ley Sinde´, abogó por buscar "un equilibrio" entre derechos e intereses . "Debemos hacerlo a través del diálogo social entre los poderes públicos y privados", dijo, después de reconocer las "grandes potencialidades" de internet. "No podemos poner puertas al campo. Al contrario, tenemos que diseñar la tabla de surf adecuada para navegar".

En declaraciones a la prensa, también se refirió a la multa de 300.000 euros impuesta al Ayuntamiento de Málaga por su red wifi gratuita (´Biznaga´). "No quiero introducirme en el terreno de otros", dijo, tras afirmar que lo que hay detrás de las actuaciones de la CMT es la "posibilidad" de que se haga "competencia desleal a operadores legalmente existentes en el mercado".