Microsoft ha decidido jubilar Windows XP, lo que plantea muchas dudas a sus todavía millones de usuarios. El final de este sistema operativo significa que la compañía norteamericana deja de dar soporte y suspende todas las actualizaciones de seguridad, parches, etc., lo que deja vía libre a los piratas informáticos para asaltar nuestro ordenador. ¿Qué se puede hacer?
La mayoría de los expertos recomiendan dejar de usar Windows XP de inmediato. Lo recomendable es instalar una versión más moderna (Windows 8), o bien cambiar de sistema operativo (el sistema de software libre Ubuntu, por ejemplo, es una buena opción).
Si se decide seguir usando XP, es necesario instalar las últimas actualizaciones disponibles, incluidas las de malware de Microsoft Security Essentials, así como actualizar los antivirus, fijando el modo de seguridad más alto.
Asimismo, es recomendable actualizar todas las aplicaciones que se empleen para evitar sustos ante posibles fallos de seguridad.
Otro consejo para los que no quieran pasar de XP es olvidarse la versión del Explorer para este sistema operativo.
También existe la posibilidad de contratar un servicio Custom Support, una solución más costosa y dirigida principalmente a empresas que por temas de compatibilidad de programas les resulta complicado instalar un nuevo sistema operativo.
Actualizar a Windows 8.1
Para actualizar el sistema desde Windows Vista o Windows XP a Windows 8.1, el usuario deberá instalarlo desde un DVD de Windows 8.1 y realizar una instalación limpia.
Esto significa que no se podrá conservar ningún archivo, configuración ni programas cuando actualices, según informa Microsoft en su página web, a modo de tutorial, para facilitar el proceso.
La empresa recuerda que Windows 8.1 no se ha diseñado para ser instalado en ordenadores que ejecuten Windows Vista o Windows XP, de modo que antes de comprar el DVD de Windows 8.1 se recomienda lo siguiente:
Descargar y ejecutar el Asistente para actualización a Windows 8 con vistas a comprobar si el PC cumple los requisitos del sistema para Windows 8.
Los requisitos son prácticamente los mismos que los del sistema para Windows 8, de modo que si el PC puede ejecutar Windows 8, en la mayoría de los casos se podrá obtener la actualización gratuita a Windows 8.1.
El Asistente para actualización también comprueba la compatibilidad de programas y dispositivos, y proporciona un informe de compatibilidad gratuito.
Hay que asegurarse de revisar los requisitos del sistema de Windows 8 para Windows 8.1 antes de comprar el DVD de Windows 8.1.
Se anima a visitar el sitio web del fabricante de tu ordenador para obtener información sobre controladores actualizados y compatibilidad de hardware.
Los requisitos del sistema incluyen procesador de 1 gigahercio (GHz) o más rápido; RAM de 1 gigabyte (GB) (32 bits) ó 2 GB (64 bits); espacio libre en el disco duro de 16 GB (32 bits) ó 20 GB (64 bits) y dispositivo gráfico Microsoft DirectX 9 con controlador WDDM.
