El Alvia 10021, el tren que ha cortado la cinta inaugural de la Variante de Pajares, partió de la estación de Chamartín con cinco minutos de retraso sobre la hora prevista, a las 13:30 horas, y en el primer vagón el Rey Felipe VI y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, junto al ministro de Fomento, Óscar Puente, y el presidente del Principado, Adrián Barbón. A bordo, además, varias decenas de invitados, representantes de la vida social, política y empresarial asturiana repiten consignas parecidas a la que el padre Ángel García, presidente y fundador de la ONG Mensajeros de la Paz, proclamaba antes de salir de la estación madrileña: “Hoy Asturias es España de verdad”. O más que nunca.

En el primer tren del AVE Asturias-Madrid, que si nada lo impide enfilará la boca de los túneles de la Variante entre las tres y media y las cuatro de la tarde, viajan, entre otros muchos, el consejero de Fomento, Alejandro Calvo, los diputados y senadores por Asturias o varios de los exministros de distintos colores políticos que tuvieron responsabilidades en la larga obra de la Variante -Magdalena Álvarez, Íñigo de la Serna o José Luis Ábalos- y una notable representación de la sociedad asturiana. Están además, emocionados, cuatro de los cinco hijos del fallecido Alejandro Rebollo, gran artífice de la Variante en su etapa como presidente de Renfe.