[endif] Para muchos coruñeses, el barrio en el que se emplaza esta calle es conocido con el nombre de Gurugú. La zona de A Falperra recibió esta denominación a causa de la popularidad que alcanzó a principios del siglo pasado el monte que rodea la ciudad de Melilla. Las empinadas cuestas de esta parte de A Coruña hicieron que el ingenio de algún vecino la comparase con la colina africana y que su ocurrencia calase entre los habitantes de la zona. Lo que pocos sabrán es que el nombre oficial de la calle Sinforiano López es en realidad Gurugú. En 1908 el Ayuntamiento la dedicó a Sinforiano López para sustituir la denominación tradicional de lugar de A Rabiada, que hacía referencia al antiguo asentamiento judío que existió allí. En 1937, otro acuerdo municipal decidió cambiar el nombre por el de Gurugú, pero no se llegó a ejecutar, por lo que continuó con la denominación de Sinforiano López. El personaje al que se recuerda con esta calle fue uno de los héroes del movimiento liberal coruñés a principios del siglo XIX. López había nacido en Madrid y se asentó en la ciudad, donde se ganó la simpatía de sus convecinos. Durante la invasión francesa de 1808 fue el hombre que levantó a la población contra las tropas napoleónicas. Reunió a varios amigos y juntos pasearon por la ciudad dando vivas al rey, lo que levantó a los coruñeses, que atacaron a los sospechosos de apoyar a los franceses. Ese mismo día sacó en procesión el retrato del monarca y constituyó la Junta de Armamento y Defensa, que luego se convertiría en la Junta Suprema de Galicia. Poca recompensa obtuvo López por sus esfuerzos, ya que tras la Guerra de la Independencia fue represaliado a causa de sus convicciones liberales. En 1815 intentó provocar un levantamiento militar en A Coruña, pero fue detenido. Se le pidió que delatase a sus compañeros de causa, entre ellos Porlier, ya preso en el castillo de San Antón, pero se negó, por lo que ajusticiado en el Campo de la Horca, hoy plaza de España. / J. M. Gutiérrez