Desde mi punto de vista, la Dirección General de Tráfico (DGT) suele atinar con sus mensajes sobre seguridad vial. Pero no siempre. Y una de esas excepciones la hallamos en lo referente a las glorietas. Paradigma de ello es el folleto de dicho organismo distribuido este fin de semana pasado. Refutar todos y cada uno de los puntos del folleto (sobre glorietas) es algo que excede a este espacio. Me voy a referir, por ello, solo a uno: el superior derecho del gráfico en el que tres vehículos abandonan la glorieta simultáneamente. Dice la DGT que solo el vehículo A realiza correctamente la maniobra. Los otros dos, según su criterio, deberían hacerlo por el carril de la derecha, que es por donde circula el A. También dice que, al hacerlo como en el gráfico, cortan la trayectoria de otros vehículos.

Pues bien, la maniobra del gráfico, según yo creo (recordemos que no hay ninguna norma que regule la circulación en las glorietas), es totalmente correcta, porque cada vehículo ocupa el carril que le corresponde sin que se produzcan conflictos entre ellos. Si todos utilizaran el carril derecho, el vehículo que ahora circula correctamente debería cederles el paso -dado que se incorpora a la glorieta- a todos los que ya están dentro de ella. Tendría muy difícil la incorporación. También dice la DGT que al hacerlo como en el gráfico, los de los carriles interiores cortan la trayectoria de otros vehículos. ¿De qué vehículos? El único que ocupa el carril derecho gira a la derecha; por tanto se puede hacer perfectamente el despliegue en ala. Es más, si el vehículo A no fuera a girar a la derecha, no debería ocupar dicho carril, sino incorporarse a alguno de los interiores, por detrás de los otros dos del gráfico o, de lo contrario, sería él quien cortaría la trayectoria de los demás. Las glorietas deben ser centrífugas y no centrípetas; es decir, deben facilitar las salidas y no bloquearlas. Véanse, si no, las de nuestra ciudad.

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