La calle como casa

Según una estimación del colectivo Coruña Sin Techo en La Coruña, nuestra ciudad, hay unos 600 indigentes, como bolsa oculta de una población sin techo de medio centenar de casos que están en fase terminal -son crónicos-: detrás de esta realidad hay verdaderos dramas humanos con importantes problemas mentales y de salud. Esta situación se produce en ausencia de políticas integrales, y con el incumplimiento sistemático del Protocolo de Atención a las Personas Sin Techo, a quienes se ignora como sujetos de derecho. Por lo que las personas sin techo padecen una situación de riesgo permanente, tanto en un sentido económico como en un sentido físico propiamente dicho. Se trate de una violencia física, del frío invernal, de la invisibilidad policial, de las enfermedades, o los problemas mentales, el resultado a veces es de muerte en la calle. En el caso de André M. G. señalamos un caso de violencia física que dio con él en el hospital. Es un individuo de edad avanzada, que al 30 de Junio duerme en el hueco de un escaparate de la calle San Andrés 116. Ese día André es agredido con un palo. Según el parte de denuncia André sangraba por la oreja izquierda a resultas de un fuerte golpe que le fue propiciado por un individuo, quien después de agredirle se aleja unos instantes, y regresa de nuevo al lugar e intenta agredirle con un ladrillo. En ese momento interviene un viandante, con cuya colaboración es detenido el agresor por la Policía local y evacuado el herido a la Residencia. El concello de Coruña es conocedor de estas situaciones, tras nuestra denuncia y entrevista con la titular de la Concellería; tras lo que entrevemos no solo una falta de claridad en las medidas a tomar, sino las escasas o nulas expectativas de llegar a un cambio real en las políticas sociales. Salvo las consabidas medidas asistenciales (caritativas) o las medidas de invisibilidad a cargo de la policía se siguen ignorando los programas de prevención, intervención e integración social del Protocolo de Atención a las Personas sin Techo. Este incumplimiento lesiona gravemente los Derechos humanos cuya privación viene dado como resultado de ser privadas de ciudadanía por una cuestión simplemente de pobreza, más que por otras causas.