El grupo PSA Peugeot Citroën apuesta por publicar "lo antes posible" el consumo real de sus vehículos con la intención de "mantener la confianza" de los clientes tras el escándalo del caso Volkswagen. El consorcio contará con la supervisión de una empresa independiente y pretende hacer "una revisión profunda de su situación en relación con las emisiones contaminantes y los consumos de combustible". PSA también anunció que tomará medidas técnicas para adelantarse a los nuevos test de homologación (WLTP) que sustituirán al ciclo actual (NEDC) y que aportarán un mayor acercamiento a los datos de uso real de los coches.

Los ministros europeos de Medio ambiente subrayaron ayer la necesidad de que se cree un sistema "más sólido de control" sobre las emisiones contaminantes de los coches, y la importancia de que haya una "rápida decisión" sobre los nuevos estándares de pruebas en condiciones reales de conducción.

El grupo automovilístico francés hizo públicas ayer las cifras del tercer trimestre, en el que las matriculaciones se desplomaron pero la facturación creció un 3,2%, hasta los 12.390 millones. La multinacional, que en el primer semestre dejó atrás las pérdidas por primera vez desde 2011, sufrió una reducción en las ventas a nivel mundial del 4,3% (616 mil vehículos) en comparación con el mismo período de hace un año, si bien en el acumulado de 2015 la bajada es menor (-1%). El único mercado que sigue funcionando a buen ritmo es el europeo, que en este tercer trimestre creció un 6,1% (con 385.000 vehículos) y en lo que va de año fue de 3,8%.