Los gallegos recurren a varios trucos para intentar cuadrar los ingresos y los gastos. Uno de ellos es tomar medidas financieras, es decir, renegociar las condiciones de los créditos o hipotecas, solicitar préstamos para hacerse cargo de los gastos corrientes o aplazar pagos, pero es una solución por la que optan cada vez menos, en concreto el 1,2% en el último trimestre de 2015, casi la mitad que un año antes y muy lejos del 6,7% que utilizó este parche a principios de 2011.

Lo que sí se ha incrementado de un año para otro ha sido el solicitar la ayuda económica de familiares o amigos, una posibilidad de la que echa mano el 7,8% de los hogares, porcentaje casi similar al de un año atrás, aunque inferior al del tercer trimestre de 2015.

Con todo, la medida económica "más habitual" empleada en las casas gallegas para sacar el máximo rendimiento de sus carteras durante el cuarto trimestre de 2015, según el IGE, fue la de cambiar los hábitos de compra y apuntarse a los productos en oferta y a las marcas blancas. A esa solución recurrieron unas 150.000 familias, el 14,2% de los hogares, pero hace un año era la norma en 246.000 viviendas, el 23% del total.

Previsiones a corto plazo

Si las expectativas se cumplen, ese porcentaje seguirá bajando ahora, a principios de año, ya que 13,8% de las familias avanza que recurrirá a ese método de ahorro, mientras un 7,3% adelanta que pedirá asistencia a sus parientes y solo un 0,7% optará por medidas financieras. En esa línea, tienen pensado irse de vacaciones en uno de cada diez hogares, los mismos que consideran que podrán hacer frente a imprevistos. Un 35,8% prevé ahorrar.