La Comisión de Industria del Congreso aprobó ayer una iniciativa planteada por Esquerra Republicana de Catalunya y pactada con PSOE, Podemos, Democracia y Libertad (DL) y el PNV, para instar al Gobierno a que prohiba el uso de la fractura hidráulica -denominado fracking- en todo el país y para que suspenda los permisos de todo tipo ya concedidos durante esta legislatura.

La iniciativa de los republicanos catalanes modificada con las propuestas de otros grupos pasa por reclamar al Ejecutivo que lleve a cabo las modificaciones legislativas necesarias para prohibir el fracking en todo el país y para suspender cautelarmente las prospecciones ya previstas, incluso las que están en fase de proyecto o permiso de investigación.

La iniciativa reclama además una moratoria durante toda esta legislatura para todos los permisos o peticiones de autorización de investigación, prospección o explotación en trámite o los que ya hayan sido concedidos, así como derogar todos los artículos normativos que favorecen la implantación de esta técnica en cualquier lugar del país.

El texto salió adelante con los 22 votos de ERC, PSOE, Podemos, Democracia y Libertad y el PNV, y pese a los 16 votos en contra de PP y Foro Asturias (FAC). Los cinco diputados de Ciudadanos se abstuvieron.

La diputada de ERC Teresa Jordà advirtió de los efectos nocivos del fracking en la salud humana, el medio ambiente y el ámbito rural. Igualmente, ha afirmado que la "España centralizadora, ultraliberal y expoliadora" pretende "imponer su autoritarismo" en zonas donde existe una "gran resistencia".

La socialista María del Puerto Gallego insistió en los conocidos "riesgos" del fracking preocupan a los ciudadanos. "Es lógico y de sentido común que el Gobierno pusiera freno a estas prácticas. Pero en contra de esa lógica, el PP hizo una huida hacia adelante", criticó.

María Rosa Martínez, de Podemos, destacó además que esta práctica es "incompatible" con otras actividades económicas pese a tener un "escaso retorno energético, económico y social".