Santander y BBVA prevén mantener a largo plazo las participaciones del 21,9% y el 6,4% que tendrán como primeros accionistas de la Nueva Merlín, la compañía que surgirá de la fusión de la socimi y Metrovacesa, y que será el primer grupo inmobiliario español. Los bancos firmaron un acuerdo por el que permanecerán en el nuevo gigante inmobiliario al menos seis meses tras su constitución, según desveló el presidente en la junta de accionistas que aprobó la fusión.