Los líderes de UGT y CCOO advirtieron ayer al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de que seguirán movilizándose por la recuperación de derechos si no se aviene a negociar. Lo afirmaron durante el transcurso de una manifestación, la primera de la legislatura en la capital de España, que reunió a 30.000 personas, según los organizadores, y 4.000 de acuerdo a datos de la Delegación del Gobierno en Madrid.

Con esta protesta, colofón de una tanda de movilizaciones celebradas en toda España, los sindicatos quisieron "presionar" al Gobierno para exigir mejores pensiones, salarios dignos y más calidad de empleo y destacar que el diálogo social que ofrece Rajoy excluye las reivindicaciones sindicales.

El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, exigió a los empresarios que tengan en cuenta las movilizaciones en lugar de pensar en "engordar más y más sus arcas". Álvarez y Fernández Toxo, líder de CCOO, advirtieron al Gobierno de que la mayoría de los ciudadanos quiere una política económica que revierta los beneficios en los españoles y, por eso, exigieron una reforma fiscal "a fondo" que acabe con el fraude.

Los líderes sindicales dieron estos avisos durante la lectura del manifiesto tras marcha sindical, que transcurrió bajo el lema Las personas y sus derechos primeros. Defiéndelos.

El secretario general de UGT apuntó que hay que iniciar un proceso de negociación para acabar con las normas que regulan la negociación colectiva y que se tiene que acabar la situación por la que atraviesan muchos sectores en los que a los trabajadores no se les aplica el convenio sectorial sino uno empresarial.

Álvarez recalcó además que las manifestaciones se mantendrán en el tiempo hasta que sea posible que la riqueza que se genera en la economía española se reparta entre ciudadanos.

Toxo, por su parte, aseguró que a pesar de haber dejado atrás la recesión y de que las empresas han recuperado ya la tasa de beneficios previa al inicio de la crisis, la situación de inestabilidad sigue "muy presente" para la mayoría de los ciudadanos del país. En su opinión, esto es consecuencia de "las políticas económicas, los recortes y de las reformas regresivas, que han sumido a una importante parte de la población en la pobreza y la exclusión".

A la manifestación celebrada en Madrid asistieron, entre otros, políticos como el coordinador federal de Izquierda Unida (IU), Alberto Garzón, el portavoz de la gestora del PSOE, Mario Jiménez, y el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias.

La ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, respondió a los sindicatos y dijo que los espera "en la mesa de negociación" que es, defendió, "desde donde hay que trabajar por los españoles".

Báñez indicó que "respeta" la convocatoria y el derecho de la ciudadanía a manifestarse y mostró su predisposición a modificar aspectos de la reforma laboral de 2012 si existe un acuerdo sobre las posibles mejoras entre sindicatos y patronales. Sin embargo, cuestionó la reivindicación de derogar la reforma al entender que ha sido uno de los pilares de la salida de la crisis y que es un modelo que están imitando "otros países como Francia e Italia". "España es junto con Alemania el país de la UE que más empleo crea", aseveró la ministra.