Gobiernos municipales de localidades del Alto Minho apuran las negociaciones con administraciones públicas y empresas privadas para disponer de más terrenos industriales y satisfacer así la ingente demanda de compañías que pelean por instalarse en el norte de Portugal. La ofensiva gallega para contener esta competencia no ha dado ningún resultado de momento y, frente a rebajas de hasta el 50% en el suelo empresarial de la Xunta para captar actividad e inversión, las cámaras portuguesas forjan alianzas para la venta de predios a "precios más accesibles" todavía. La última, la de las cámaras (Gobiernos locales) de Vila Nova de Cerveira y Valença do Minho, que promueven conjuntamente un megapolígono industrial que una las dos localidades para colmar la necesidad creciente de espacio. Ambos Ejecutivos locales se reunirán con la institución que vela por el desarrollo del norte portugués, la Comissão de Coordenação e Desenvolvimento Regional do Norte, que gestiona fondos europeos de desarrollo.

Este gran polígono industrial suma a día de hoy un espacio total de 140 hectáreas sin actividad y "unirá" ambas localidades, separadas por algo más de 14 kilómetros, a través de un nuevo vial. La arteria de la futura infraestructura será la nacional EN-13.