Abanca ha obtenido en los seis primeros meses de 2017 un beneficio neto de 229 millones de euros, un 23,1% más en comparación con el mismo periodo del ejercicio anterior.

El crecimiento del negocio recurrente, un 16,2%, ha permitido a Abanca obtener una rentabilidad del 11,4%.

La cartera crediticia de Abanca avanzó un 6% interanual y su tasa de morosidad se redujo hasta el 5,6%, con una cobertura de activos problemáticos del 55,0%.

La entidad, que ha presentado este balance en rueda de prensa en Vigo, ha reforzado su orientación a pymes y autónomos, colectivos que reciben el 61% de la financiación concedida.

El presidente de Abanca, Juan Carlos Escotet, se ha mostrado "muy complacido" por la "mejora significativa" en la cuenta de resultados de la entidad durante la presentación de los resultados del primer semestre, acompañado por el consejero delegado, Francisco Botas, y el director general financiero, Alberto de Francisco.