El párroco gallego Luis Rodríguez Patiño insta al Papa a que reabra el debate sobre el celibato entre los sacerdotes por considerar que va "contra natura". El sacerdote -encargado de varias parroquias en los municipios coruñeses de Monfero y Aranga así como de Xermade o Guitiriz, en Lugo- también defiende que las mujeres puedan dar la homilía como los hombres, aunque admite que es "más difícil" que esto pueda llevarse a cabo.

El sacerdote, conocido también por comentarios en los que pidió la excomunión de banqueros y políticos corruptos, rechaza que el celibato se pueda considerar como una "norma divina". De este modo insistió en que deriva del "derecho eclesiástico humano" porque "fue en el siglo IV cuando se impidió que los curas se casaran", recuerda.

"No tiene sentido", recalcó Luis Rodríguez Patiño, coordinador de la UNED Sénior de Xestoso-Momán. A su juicio, el celibato "trunca la vocación" de sacerdotes por optar, en unos casos, por casarse en lugar de dedicar su vida a la Iglesia o, en otros, por impedirles ejercer cuando deciden compartir su vida con una mujer.

Por ello, le pide al nuevo Papa que dé pasos que permitan reabrir el debate sobre esta cuestión, aunque admite que "es difícil acabar con una mentalidad", añade respecto a los que defienden el celibato.

En la misma línea, se muestra abierto a la posibilidad de que las mujeres puedan ser, al igual que los hombres, sacerdotes. No obstante, en este caso lo ve "más difícil porque cerró el grifo Juan Pablo II", añade sobre las normas impuestas durante su Papado.