Un varón, de 68 años y que recibió un riñón de un donante cadáver, fue el protagonista el pasado mes de febrero del trasplante 5.000 del Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac). Una cifra que lo sitúa entre los centros que más operaciones de este tipo han realizado en todo el país, pero que solo supone un punto y seguido para el personal médico. "Tuvimos que ir hacia atrás en la lista para ver quién había sido el número 5.000", bromeaba ayer el coordinador de trasplantes del Chuac, Antón Fernández, quien aseguraba que esta cifra "no es el final de nada", sino "el principio de otros 5.000 o los que vengan" y resaltaba la importancia de llegar a esta cantidad de operaciones. "Muy pocos hospitales españoles han llegado a esta cifra, se pueden contar con los dedos de la mano", sostenía para recordar que detrás de cada trasplante "hay la generosidad de los donantes y mucha ilusión y esperanza de los pacientes".

El centro coruñés superaba la barrera de los 5.000 trasplantes el 25 de febrero cuando un paciente recibía un riñón gracias a un donante del Hospital de Pontevedra. "La operación fue un éxito y el paciente está muy bien", explicó ayer Fernández. Una cifra redonda que llega 34 años después de que el Chuac comenzase a practicar este tipo de operaciones. Era en 1981 cuando el hospital debutaba en el mundo de los trasplantes con el de renal en donante vivo para a los pocos meses realizar los primeros trasplantes renales de donante cadáver. De este modo, fue progresivamente incorporando nuevos trasplantes a sus servicios -en 1991 se realizó el primer cardíaco, en 1994 el hepático y en 1999 se realizaron los primeros de páncreas y pulmón- hasta convertirse en un referente a nivel estatal.

Más de tres décadas en las que el hospital ha recibido los órganos de 745 donantes para poder realizar un total de 2.801 trasplantes renales, 966 de hígado, 706 de corazón, 488 de pulmón y 93 de páncreas. A ellos habría que sumar, 61 trasplantes infantiles, según explicaron ayer desde el propio hospital. "Ahora mismo no está previsto incorporar ningún nuevo tipo de trasplante a los servicios del hospital", explicaba ayer Antón Fernández, quien reconoce que igual el área en el que el centro está más "cojo" es en el trasplante infantil aunque no lo ve como algo negativo. "Es cierto que para ciertos trasplantes, los niños tienen que ir fuera de Galicia, pero se trata de operaciones muy específicas y a veces es mejor que un mismo centro realice 20 operaciones y esté especializado y no que cuatro hospitales realicen cinco cada uno", resaltaba.

El trasplante, señal de identidad

Con motivo del trasplante número 5.000, la dirección del Chuac quiso también destacar el trabajo que hay detrás de cada operación de este tipo. "Para realizar un solo trasplante intervienen una media de cien personas en las tres fases: donación, extracción del órgano y trasplante", señaló Antón Fernández. "Detrás de un trasplante no solo están los médicos sino el personal de enfermería, trabajadores sociales, administrativos, etc.", añadió el gerente del Chuac, Francisco José Vilanova. Ambos resaltaron además la importancia del sistema de trasplantes español. "Es una señal de identidad del sistema sanitario público español. Esto significa que hoy en día un español es el ciudadano del mundo que más opciones tiene de ser trasplantado, más que otro europeo, americano o cualquier rico", señaló Fernández.

Pasada la barrera de los 5.000, el reto para el Chuac es "mantener la actividad" y "adaptarnos a la situación de cada momento". Algo que, según Fernández, el hospital hace desde que se estrenó ya que en estas tres décadas han cambiado mucho las cosas. "En 1981, la edad media del donante era de 40 años y se consideraba alguien mayor, en 2013 no tuvimos a ningún donante menor de esa edad y en la actualidad, la edad media de los donantes en Galicia es de 65 años", señalaba Fernández, quien también explicó cómo la reducción de muertes encefálicas ha provocado que aumente la donación en asistolia controlada (parada cardíaca) o cómo ha evolucionado el trasplante renal de donante vivo. "Casi llevamos 200 trasplantes de este tipo", indicó. Otro de los avances en trasplantes es la apertura de un banco de córneas que ha permitido reducir la lista de espera a la mitad en Galicia en solo seis meses.