El cannabis se mantiene como la droga más consumida en la UE, pero crece la oferta y el consumo de nuevas drogas sintéticas, algunas de las cuales son altamente tóxicas o incluso letales, según un informe publicado ayer por el Observatorio Europeo de la Droga y Toxicomanías (OEDT) y Europol.

Unos 22 millones de europeos son consumidores de cannabis, e incluso el 1% de los adultos de la Unión Europea (UE) usa a diario esta droga, que genera entre 8.400 millones y 12.900 millones de euros al año, y que abarca el 38% de todo el mercado comunitario de las drogas ilegales.

Por otra parte, el informe alerta del crecimiento de nuevas drogas sintéticas, a menudo vendidas como alternativas legales al cannabis, el LSD o la cocaína, pero que son altamente tóxicas y algunas incluso pueden provocar la muerte. Las autoridades detectaron 560 sustancias de este tipo, 100 descubiertas sólo en 2015, y advierten de que "no hay señales de ralentización" en el desarrollo de estos estupefacientes.