Un total de 26 menores de edad de la comunidad gallega vivían el año pasado con una orden de protección o medidas cautelares al ser víctimas de malos tratos, lo que supone un incremento del 73% en sólo un año ya que en 2014 eran 15 las adolescentes con estas medidas de protección, según los datos sobre violencia de género publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE). A nivel estatal son 637 las menores que cuentan con una orden de protección de su maltratador -un 10,6% más que en 2014- y Andalucía (157) y la Comunidad Valenciana (133) encabezan la clasificación nacional.
En el conjunto del país, las maltratadas con orden de protección ascendieron en 2015 a 27.624 y casi la mitad en la franja de edad de los 25 a los 39 años. Los datos del INE revelan que la edad media de la víctima de malos tratos en España es 36,5 años y las franjas que experimentaron un mayor aumento fueron las mujeres de 50 a 54 años (un 17,6% más) y las menores (un 10% más). En Galicia, la evolución es diferente. Mientras las menores con orden de protección se dispararon un 73%, la cifra de víctimas entre los 45 y los 64 años bajó de 301 en 2014 a 273 en 2015 (un 9% menos). En total, la comunidad gallega cuenta ahora con 1.187 mujeres maltratadas con medidas de protección.
La estadística del INE indica que sólo en siete comunidades bajó el número de maltratadas a las que se precisa proteger con una orden de alejamiento u otras medidas cautelares. Una de ellas fue Galicia, que ocupa el quinto puesto con mayor descenso (un 2,3% menos). Si se analiza el número de víctimas de violencia de género por cada mil mujeres mayores de 14 años, Galicia es la tercera comunidad con menor tasa (0,9), solo por debajo de País Vasco (0,6) y Cataluña (0,8).
Los datos correspondientes a los hombres reflejan que el año pasado 27.562 fueron registrados como denunciados por violencia de género en todo el país (un 2,1 % más que en el año anterior) y que tenían una media de edad de 39,5 años. Por lugar de nacimiento, dos de cada tres denunciados (el 68,4% del total) habían nacido en España, la misma proporción que el año anterior.
En el 25% de los casos registrados, la víctima y el denunciado eran cónyuges y en el 6,8% eran excónyuges, mientras que el 23,2% tenían una relación de pareja de hecho y el 21,1 eran expareja de hecho. En tres de cada cuatro parejas (74,3 %) el denunciado y la víctima tenían entre 20 y 49 años. Del total de infracciones penales imputadas en 2015 se contabilizaron 30.990 delitos y 1.138 faltas.
