Un 10% de los niños atendidos por Cruz Roja Española no realiza alguna de las tres comidas diarias (desayuno, comida o cena) y casi la mitad (47%) asegura que pasa frío en casa, según un informe de la organización. Así se desprende de su último boletín sobre la vulnerabilidad en la infancia que analiza la percepción de 5.195 niños de entre 8 y 14 años participantes en el Programa de Promoción del Éxito Escolar.

Además, de los datos se desprende que un 18% de los niños no tiene juegos ni juguetes, que un 17% ha perdido la casa y se ha tenido que mudar y que un 41% comparte dormitorio. Asimismo, un 40% de los pequeños dice que no puede ir al dentista.

El estudio también revela que un 29% de los encuestados no puede ir al comedor de su colegio porque sus padres no tienen dinero para ello; que un 12% carece de ropa o uniforme escolar en buen estado; un 17% no tiene equipación para hacer deporte y un 36% no dispone de ordenador o tableta en casa para hacer los deberes o jugar.

Estas carencias son consecuencia en la mayoría de los casos de los efectos de la crisis. Un 52% de los chicos asegura que su familia ha pasado por problemas económicos "graves" en el último año. El desempleo es señalado como una de las principales causas de esta situación. El 36% de los menores consultados afirma que ninguno de los adultos de su hogar tiene un trabajo estable y otro 34%, que solo uno de los componentes de la unidad familiar lo tenían.

Según el modelo de familia, el informe señala que los niños que viven en hogares monoparentales tienen más riesgo de pobreza pues estas familias muestran un porcentaje más elevado de carencias en relación a la calefacción, el coche familiar, internet o equipación para el colegio.

En cualquier caso, el 90% de los niños tiene una opinión buena o muy buena de su vida y el 95% dice ser feliz, a pesar de las carencias que sufren, unas cifras que Cruz Roja relaciona con "el optimismo vital propio de la edad".

La organización advierte de que las condiciones en las que viven los más pequeños pueden tener efectos en el desarrollo infantil a todos los niveles, desde la salud a la escuela y pueden ser "un cauce para la transmisión intergeneracional de la pobreza y la desigualdad".

Por otro lado, el Comité Internacional de la Cruz Roja dijo ayer que pagará la factura de electricidad para evitar que 600.000 personas que viven en la región separatista oriental de Ucrania se queden sin agua, tras la interrupción del suministro energético a las estaciones de bombeo. Se trata de una medida de emergencia y excepcional, señalaron ayer fuende esta organización internacional.