La ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Dolors Montserrat, celebró ayer que España llegará este año a los 400.000 trasplantes de médula ósea realizados, un objetivo que el plan nacional había marcado para 2020 y que se logrará tras llegar en 2017 al "récord" de 358.000. En declaraciones antes de visitar el Instituto de Investigación Germans Trias i Pujol (IGTP), en Badalona, acompañada del delegado del Gobierno en Catalunya, Enric Millo, agradeció la "generosidad de todos los ciudadanos" que han hecho posible el hito y la labor de los profesionales.

La ministra destacó el trabajo que realiza la Fundació Josep Carreras, que está en este instituto, y que trabaja con el Ministerio de Sanidad en el registro nacional de trasplante.

Montserrat aseguró que ha visitado el centro para conocer el "buen puerto, que está clarísimo" que llevan los proyectos de investigación en salud, y para conocer cómo avanza la construcción del nuevo Centro de Medicina Comparativa y de Bioimagen. Ha destacado la importancia de invertir en mejorar los diagnósticos y tratamientos precoces, prevenir las enfermedades y promocionar la salud, con el objetivo de poder vivir más años y vivir mejor, ante "el gran reto demográfico" que afronta España, el segundo país del mundo en esperanza de vida.

Al ser preguntada por la posibilidad de implementar un nuevo antídoto para toxicómanos, Montserrat ha dicho: "Esto realmente lo estamos estudiando, dentro de la nueva Estrategia nacional de adicciones". La ministra recordó que será la tercera estrategia que existirá en el Estado para este ámbito, y mientras las dos anteriores -de 2000 y 2008- se centraban en las drogas, ésta ha cambiado el nombre y abarca más adicciones. "No solo incorporamos las drogas como tal, sino que incorporamos por ejemplo las adicciones al juego por internet o adicciones tecnológicas", señala.