La educación en Galicia, en manos de las mujeres: son el 74% en colegios e institutos

El colectivo educador sigue envejecido pese a las OPE E Unos 3.000 docentes piden reducciones y trabajan a tiempo parcial

Una profesora escribe en un encerado. |  // 13FOTOS

Una profesora escribe en un encerado. | // 13FOTOS / C. Villar

C. Villar

Educación, salud y servicios sociales. Esas son las principales vías por las que optan las mujeres a la hora de elegir estudios. Los Gobiernos llevan años intentado promover vocaciones científicas y tecnológicas en las niñas —ayer mismo se celebraba el Día de las Niñas en las TIC—, pero la brecha se resiste. “Pese a los cambios que han ido modelando la realidad social española en las últimas décadas, las adolescentes y los adolescentes sigan manteniendo básicamente los mismos patrones de elecciones académicas que las generaciones anteriores”, concede el Ministerio de Educación. No es que sea algo negativo per se; de hecho, sanidad y educación son “pilares de la sociedad”, pero el Gobierno quiere desterrar estereotipos para una elección “libre de prejuicios”.

Sin embargo, esa brecha se ha agrandado en la práctica en profesiones como la educación. Al menos en el caso de Galicia, los últimos datos del Ministerio de Educación revelan que las mujeres suponen ya el 74,3% del profesorado que imparte clases en enseñanzas no universitarias de régimen general, es decir, excluyendo del análisis los efectivos que dan clase en escuelas de idiomas, de artes o deportivas.

Además, esa feminización de la educación ha experimentado una tendencia casi continua al ascenso desde el primer año al que el Gobierno permite retrotraerse, 1990. Entonces ya eran mayoría, al representar el 63,9% del colectivo docente, y en la actualidad esa prevalencia se ha elevado un 16,2%. Solo en Cataluña se registra un porcentaje superior, de casi el 75%.

A diferencia de otros ámbitos de la sociedad, donde aunque la mujer constituye el grueso de los efectivos, ese peso no encuentra reflejo después, a la hora de ocupar cargos directivos —como ocurre, otra vez, en las empresas tecnológicas—, en el caso de la enseñanza no universitaria las mujeres concentran la inmensa mayoría de los puestos de mayor responsabilidad de los centros. En el curso 2022-23, que es el que analiza en detalle el informe del Ministerio de Educación, ellas asumían casi siete de cada diez direcciones y puestos de secretaría y como jefas de estudio el porcentaje roza está cerca del 73%. Lo que también permiten constatar los datos relativos al curso pasado es que si los profesores que imparten clase en la universidad peinan canas, en colegios e institutos tampoco son ajenos al fenómeno. Han cumplido ya al menos 60 años un 8,2% de docentes gallegos, más de 3.300, lo que supone el tercer porcentaje más elevado de las autonomías, y, del lado contrario, solo un 5,2% no ha soplado todavía las 30 velas.

Y todo eso a pesar de las constantes convocatorias de ofertas públicas de empleo de los últimos años que sí han permitido engordar el número de profesores, aunque en la pública los educadores sean casi medio millar menos que en el curso de la pandemia, 2020-21. Si bien los nacimientos han adelgazado, el colectivo de maestros y de profesores ha crecido ligeramente, casi un 5% durante la última década, considerando pública y privada. El número de alumnos por cada docente descendió en ese mismo período del 10,2 a 9,9.

La estadística ministerial revela asimismo que un 8% de los docentes gallegos que da clase lo hace con una dedicación parcial. Sindicatos educativos explican que la cifra incluiría reducciones de jornada. En total, serían 3.400 profesores los que no tienen dedicación completa y siete de cada diez de ellos trabajarían en la enseñanza privada o concertada.

El 97% del alumnado gallego de 4º de Infantil obtiene plaza en el centro preferente

El 97% de los alumnos gallegos que entran el próximo curso en el colegio en 4º curso de Infantil (3 años) obtuvo plaza en el centro educativo elegido como primera opción. Así se desprende de los datos provisionales del proceso de admisión tras las novedades introducidas este año, con la mejora de las ratios de 25 a 20 alumnos al amparo del acuerdo con las organizaciones sindicales.En total, informó la Xunta, se recibieron 14.379 solicitudes de niños de tres años para un total de 21.137 plazas ofertadas, con lo que se ocuparán el 68% y quedan vacías, a día de hoy, el 32%. Tan solo un 3% de estos alumnos no consiguió una plaza en el centro de primera elección, lo que supone 430 alumnos en toda Galicia, frente a los 13.949 niños que sí estudiarán en el primer centro escogido por sus familias. La incidencia de la disminución de las ratios en las aulas de los más pequeños es “mínima”, destacó el Gobierno gallego. En el cómputo general, la subida de la tasa de alumnos no admitidos en el centro de primera opción es de solo 2,2 puntos porcentuales respeto del curso 2023/24.En los casos de más demanda que oferta de puestos, las plazas serán asignadas, como siempre, por los centros o la comisión de escolarización de cada zona, según corresponda, en función del baremo aplicable a cada solicitud de admisión y atendiendo a los centros de preferencia marcada, tal y como establece la normativa. En los ayuntamientos con un único centro educativo, los niños obtendrán plaza en el mismo, aunque la demanda supere la oferta.

Suscríbete para seguir leyendo