La búsqueda de los tripulantes del helicóptero del Ejército del Aire que cayó al Atlántico con tres militares "continúa en todas las áreas posibles y con todas las hipótesis abiertas", según Defensa. El rastreo se mantiene por mar y aire con robots submarinos. El aparato cayó al mar cuando regresaba de Senegal a la base canaria de Gando.

La búsqueda de los tripulantes se hace en el punto donde fue hallada la baliza de emergencia del helicóptero, hundido el pasado jueves a unos 40 metros de profundidad y a unas 40 millas (74 kilómetros) de la costa del Sahara.

El Ministerio de Defensa no descarta ninguna hipótesis sobre el paradero de sus tripulantes, incluido un posible secuestro, aunque no considera que sea "la más plausible". El ministro, Pedro Morenés, señaló que las familias de los militares mantienen una entereza "ejemplar", "a pesar del sufrimiento", y ha resaltado que "la esperanza" les ayuda a "sobrellevar la incertidumbre".

Un avión de vigilancia CN 235 sobrevuela la zona junto a dos helicópteros Superpuma españoles y un helicóptero y un avión Defender marroquí, que se turnan para patrullar una amplia zona marítima en busca de cualquier indicio de la aeronave. Con la intención de localizar la cabina del helicóptero, cuatro buques trabajan en un área de seis por seis millas: el buque de la Armada Camino Español, el Olympic Zeus y dos patrulleras marroquíes. Además se sigue en contacto con las autoridades marroquíes para vigilar a los pesqueros.