La Guardia Civil ha abierto una investigación tras el hallazgo de un bebé muerto, una niña, en un contenedor en Callosa d'En Sarrià (Alicante) todavía con restos de placenta. Los agentes realizarán pruebas de ADN a la recién nacida para avanzar en las pesquisas y, una vez se determine, detener a los padres por este hecho delictivo. La menor nació tras unos seis o siete meses de gestación.

La recién nacida estaba dentro de una bolsa en un contenedor y fue una mujer de avanzada edad que buscaba objetos en el interior del mismo la que encontró el cadáver, que aún tenía el cordón umbilical. La Policía Local se desplazó al lugar del hallazgo y la Guardia Civil se hizo cargo de la investigación, que comprende la práctica de pruebas de ADN y de posibles huellas.

El cuerpo de la niña fue llevado al Instituto Anatómico de Alicante para averiguar las causas de la muerte y los agentes se incautaron de los contenedores para su análisis. También procedieron a tomar declaración a la mujer que había hallado el cadáver.

El alcalde de Callosa d'En Sarrià, Josep Saval, lamentó el suceso ocurrido en la localidad y manifestó asimismo que los poderes públicos deben tomar nota de las enormes dificultades por las que atraviesan muchas familias.