El 18 de septiembre la localidad pontevedresa de Gondomar era escenario de un brutal accidente, cuando un vehículo Mercedes AMG en el que viajaban cinco jóvenes se salía de la vía en la PO-340, impactaba contra unas rocas y continuaba sin control unos 300 metros hasta parar a la altura de una gasolinera. Todos los ocupantes del turismo resultaron heridos y días después uno de ellos, que iba en el centro del asiento trasero y que fue el que resultó peor parado, fallecía en el Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo por la gravedad de sus lesiones. De la investigación del siniestro se hizo cargo la Guardia Civil de Tráfico, que ya entregó en el Juzgado de Instrucción número 8 de Vigo -el que estaba de guardia el día de los hechos- el atestado realizado. Y en las diligencias abiertas el juez ha citado al conductor, vecino de la parroquia gondomareña de Vincios, en calidad de investigado, según confirmaron fuentes del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG).

Tras el accidente y las primeras indagaciones, la Guardia Civil ya atribuyó a este joven, que debido a sus lesiones estuvo hospitalizado, la presunta autoría de un delito contra la seguridad vial. Además de la citación del conductor, las mismas fuentes señalaron que el magistrado tomará declaración a los perjudicados así como a testigos. No serán las únicas diligencias que se practiquen, ya que en este caso cobran también importancia las pruebas periciales para determinar la responsabilidad del piloto.

Concretamente, son dos las cuestiones que resultan claves en esta instrucción judicial. Una de ellas es la determinación de la velocidad a la que circulaba el joven cuando ese domingo de septiembre, cuando apenas pasaban unos minutos de las siete de la madrugada, perdió el control de su coche y sufrió el aparatoso accidente. Ya las primeras apreciaciones determinaron que existió un notorio exceso de velocidad en un vial cuyo máximo permitido es de 50 kilómetros por hora, motivo por el cual esta circunstancia fue objeto de pesquisas. Las fuentes oficiales consultadas señalan que el juzgado está pendiente del informe pericial que establezca a cuánto iba el conductor.

También será objeto de estudio el resultado positivo en alcohol que dio este chico. La prueba que le realizaron los agentes de Tráfico arrojó que superó el límite máximo de 0,25 miligramos por litro de aire espirado, al fijar un resultado de 0,36. Este resultado lo dio tiempo después de la colisión y lo que quiere el tribunal es que se haga una estimación de qué tasa podría tener al tiempo del accidente.

Dispositivo

El siniestro había movilizado a un amplio dispositivo de emergencias en el vial que une Gondomar con A Ramallosa. Durante el trayecto en el que el vehículo circuló sin control tras la salida de vía perdió varios de sus componentes: el motor salió despedido y acabó en medio de una finca, mientras que otras piezas como la batería fueron halladas sobre el asfalto.