Ausente de la gran pugna por la Palma de Oro, el cine en español llega a la 70 edición del Festival de Cannes, que arranca mañana, a través de sus secciones paralelas, que han hecho un hueco a cineastas consagrados como el mexicano Michel Franco y a debutantes como las argentinas Cecilia Atán y Valeria Pivato.

Mientras que España se tendrá que contentar con un cortometraje en la Semana de la Crítica, Los desheredados, de la joven catalana Laura Ferrés, y con Pedro Almodóvar como presidente del jurado principal, el que otorgará una Palma de Oro que no hablará español.

La escasa presencia española se completa con la actriz Emma Suárez, protagonista de la película Las hijas de abril, con la que Franco competirá en la segunda sección del festival, Una cierta mirada, creada en 1978 para recompensar proyectos originales por su contenido o estética.

También en ese apartado competirá La cordillera, del argentino Santiago Mitre, con un espectacular reparto encabezado por sus compatriotas Ricardo Darín y Dolores Fonzi y con la española Elena Anaya, el chileno Alfredo Castro o el mexicano Daniel Giménez Cacho. Supone el regreso de Mitre a Cannes, tras haber recibido en 2015 el gran premio de la Semana de la Crítica con Paulina (La Patota). Y las realizadoras argentinas Atán y Pivato se darán a conocer con la road movie La novia del desierto, una coproducción con Chile con Paulina García como actriz principal.

Fuera de competición, acaparará la atención mediática el mexicano Alejandro González Iñárritu, autor de obras como Babel o Birdman, con su instalación de realidad virtual Carne y Arena, que en siete minutos de duración pone al espectador en la piel de inmigrantes y refugiados. La Quincena de Realizadores, lanzada en 1969 para "descubrir filmes de jóvenes autores y saludar las obras de directores reconocidos", servirá de escaparate cinematográfico para dos proyectos colombianos y uno brasileño. Entre ellos, la ópera prima de la colombiana Natalia Santa La defensa del dra gón, que lleva a la pantalla a "un ajedrecista que vive de apostar partidas, un relojero que no se resigna a cerrar su taller y un homeópata cuya vocación es el póquer", y los cortos La bouche, de su compatriota Camilo Restrepo, y Nada, del brasileño Gabriel Martins.

Chile estará presente también en la Semana de la Crítica, sección paralela centrada desde 1962 en la búsqueda de nuevos talentos con la proyección de primeros o segundos largometrajes. Con Los Perros, que se adentra en la relación entre una burguesa y su profesor de equitación, un antiguo coronel sospechoso de exacciones durante la dictadura, Marcela Said vuelve a Cannes tras haber llevado en 2013 a la Quincena su ópera prima, El vera no de los peces voladores.