La sonda Cassini ha revelado que los anillos de Saturno tienen protuberancias y no son tan planos como pensaban los científicos, según ha informado el Laboratorio de Propulsión (JPL) de la NASA. El descubrimiento se ha producido en una misión realizada conjuntamente por la NASA, la Agencia Espacial Europea y la Agencia Espacial de Italia.

Esas protuberancias pueden tener hasta la altura de una montaña terrestre y quedaron al descubierto durante el equinoccio del planeta, hace un mes, dijo JPL en un comunicado. "Es como si nos hubiésemos puesto anteojos para la tercera dimensión por primera vez", manifesta Bob Pappalardo, científico del proyecto.

El pasado 11 de agosto la luz del Sol alumbró de frente los delgados anillos de rocas y hielo, lo que pareció hacerlos desaparecer, como cuando se mira de perfil una hoja de papel

Durante una semana los científicos de Cassini los observaron y pudieron ver las protuberancias expuestas en el perfil de los anillos.

"Lo más sorprendente fue ver tantos lugares de relieve vertical por encima y por debajo", manifiesta Linda Spiiker, científico del proyecto en JPL. "Entender lo que estamos viendo tomará tiempo, pero las imágenes nos ayudarán a conocer la edad de estos anillos y la forma en que han evolucionado", señala.

Una de las protuberancias descubiertas por Cassini tiene una altura de unos 4.000 metros.