Concierto solidario Residencia Padre Rubinos

Quienes conocimos al jesuita coruñés, Antonio Rubinos, no lo olvidaremos jamás. Personificaba la bondad, la tolerancia, el lado más humano de una religión que muchos sacerdotes predicaban con un Dios riguroso y vengativo que, al menor descuido, nos precipitaba en los abismos infernales para toda la eternidad. Su vocación de servicio lo llevó a promover y regir la institución benéfica que lleva su nombre para que a ningún menesteroso faltase un techo donde cobijarse y un pedazo de pan que llevarse a la boca. Se sumaba así a tantas otras manifestaciones asistenciales de una capital que ha dado muestra de una sensibilidad social extraordinaria. Como la da también de una sensibilidad musical fuera de lo común. Así, aunadas música y solidaridad, se ha planteado un concierto que llevó al Teatro Colón, en tiempos de crisis, a un gran público que colmó el coliseo y además disfrutó de un grato acto musical. Colaboraron ad honorem -o casi- cuantos lo hicieron posible, con mención especial para Ainhoa Arteta y Borja Quiza.

En la primera parte, la orquesta interpretó El arca de Noé, poema sinfónico, original para Banda, de Óscar Navarro; y Danzón nº 2, de Arturo Márquez, que ha popularizado el célebre director de orquesta, Gustavo Dudamel. En la segunda, fragmentos de ópera, opereta y zarzuela, que hicieron las delicias del público. El Coro aportó su hacer polifónico al precioso Canto a Murcia, de La parranda, de Alonso, que cantó Quiza; y a la maravillosa plegaria, Ineggiamo al Signor, de Cavalleria rusticana, de Mascagni, que interpretó Arteta. Ambos conquistaron al público con su versión del dúo de La viuda alegre, de Léhar. Concluyó el concierto entre gritos de entusiasmo, y se concedieron varios bises.

Intérpretes: Ainhoa Arteta, soprano Borja Quiza, barítono Coro y Orquesta Gaos

Director: Fernando López Briones

Programa: Navarro, El arca de Noé; Márquez, Danzón nº 2; oberturas y preludios, arias, dúos y romanzas de óperas. operetas y zarzuelas