¿Un “Covadonga-Superdépor” en el Carlos Tartiere?

Hay detalles que demuestran que el Deportivo mantiene su aura del pasado a pesar de la delicada situación que atraviesa. El Covadonga será el rival de los blanquiazules en la primera ronda de la Copa del Rey que se disputará en el puente del Día de Todos los Santos, entre el 31 de octubre y el 2 de noviembre, y el modesto equipo ovetense lo celebró como tal ayer al conocer el emparejamiento. “El Dépor, el Dépor”, festejaron sus jugadores, reunidos en el bar de la sede del club para seguir el sorteo celebrado en la sede de la Federación. No será un partido cualquiera para el humilde conjunto del barrio de Teatinos, por eso solicitará poder jugar en el Carlos Tartiere aprovechando que al Oviedo el sorteo lo emparejó con el Manresa y que se enfrentará en una eliminatoria inédita a un doble campeón del torneo, por más que la situación actual del club blanquiazul esté lejos de aquella etapa gloriosa.

“Yo tengo 42 años y para mí el Dépor es el Superdépor. Yo viví aquella explosión con Arsenio y para nosotros es un grato recuerdo el que tenemos del Deportivo de La Coruña. Lo recibiremos con los brazos abiertos”, proclama Jonathan García, vicepresidente del club asturiano. “Para nosotros el Dépor siempre será un equipo grande”, añade.

Será un partido también para la nostalgia de aquellos que quieran recordar las visitas a Oviedo del Deportivo, interrumpidas por el descenso blanquiazul después de años de ausencia por la complicada situación que atravesó también el histórico club asturiano. “Esperemos que venga mucha gente, tanto del Dépor como de Oviedo que quiera recordar viejos tiempos”, destaca Jonathan García.

El Covadonga tampoco es un club cualquiera. Detrás de su espíritu modesto late un club íntimamente ligado a su ciudad y al popular barrio de Teatinos. Fundado a finales de la década de los 70, rápidamente se convirtió en una referencia en la formación de jugadores. Por sus equipos han pasado futbolistas profesionales como el exdeportivista Adrián López, Saúl Berjón o Santi Cazorla, y por sus banquillos conocidos entrenadores de la talla de Iván Ania o José Alberto López, actual técnico del Racing de Santander.

Nadie atendió a la queja de Fernando Soriano

El Covadonga sería algo así como el equivalente ovetense del Victoria coruñés. Es uno de los conjuntos asturianos con más licencias, un modesto modélico que vivirá una noche especial. “Somos un equipo de barrio y de cantera. Tenemos 450 niños con nosotros y somos un recién ascendido a Segunda RFEF”, resume su vicepresidente.

En esa categoría ha coincidido con el Fabril esta temporada. El filial deportivista ya ha visitado el campo Álvarez Rabanal, donde se impuso de manera contundente (0-3) con goles de Kevin Sánchez, Diego Gómez y Rubén López, pero lo más probable es que ese escenario de césped artificial no se pueda utilizar en la Copa. “No creo que podamos jugar en nuestro campo. Barajamos otras opciones, sobre todo por el tema de las televisiones y la luz. Es muy probable que juguemos en el Tartiere o en otro campo que hay aquí en Oviedo, pero viendo la entidad del rival barajamos jugar en el Tartiere”, avanza Jonathan García sobre la solicitud de jugar en el estadio del Oviedo

La visita del Deportivo también es un deseo cumplido para el club asturiano, que como conjunto de Segunda RFEF tenía la posibilidad de enfrentarse a un equipo de Segunda División. “Teníamos claro que queríamos Oviedo o Sporting, no pudo ser, y después ya tocaba Racing o Dépor, para que haya un desplazamiento corto y podamos tener ambiente en el campo. Lo que queremos es que haya un buen ambiente de fútbol y una buena entrada. Para un equipo de barrio, que nos visite un equipo como el Deportivo y podamos movilizar a gente será fantástico”, subraya el vicepresidente del Covadonga.

El club del barrio de Teatinos está también íntimamente ligado al Oviedo, que no hace mucho pasó por las penurias actuales del Dépor. “Que la gente no lo abandone. Lo que tienen los clubs son los aficionados, si se pierde eso se pierde la identidad”, recomienda Jonathan García.