El Fabril busca sellar la salvación en un Abegondo de gala

Llegó la hora de la verdad para un Fabril que tiene ante sí la oportunidad de sellar la salvación de manera matemática y dejar los deberes hechos antes de la última jornada. Este domingo a las 12.00 horas recibe al Pontevedra, segundo clasificado en liga después de caer en casa frente al Ourense CF y decir prácticamente adiós al ascenso directo al quedarse a tres puntos de distancia y con el golaveraje perdido. Pero los de Óscar Gilsanz deben mirarse a sí mismos y eso significa que están ante una auténtica final. Ha sido una campaña muy larga en la que los blanquiazules han llegado a coquetear con el descenso. Hoy pueden cerrar ese capítulo y poner el sello definitivo a la temporada.

Las cuentas son sencillas. Si el Fabril gana, se salva. Necesita una victoria en los últimos dos partidos para lograrlo. Ahora mismo aventaja en cuatro puntos al Racing Villalbés y en tres a la Gimnástica, con quien sí tiene la diferencia de goles ganada tras el 1-0 en Abegondo en la jornada 27. De no ganar hoy, se la jugarían ante un Oviedo Vetusta ya descendido con 30 puntos.

Abegondo se convertirá en un mini Riazor después del llamamiento de Riazor Blues y la Federación de Peñas a animar a los chorbitos. Habrá en torno a mil deportivistas en las gradas después de que las entradas volasen rápidamente. Nadie se quiere perder el que, además, será el último encuentro de la temporada en la ciudad deportiva. Ni Fabril ni Dépor Abanca, en principio y salvo descalabro del filial, volverán a jugar este curso como locales. No habrá, eso sí, grada supletoria. La falta de tiempo para planificar hizo imposible rememorar otros tiempos en los que había dos gradas para animar a los jóvenes talentos de la cantera.

Óscar Gilsanz ha citado a todos los jugadores a su disposición y solo el pontevedrés Diego Vilán, lesionado, se perderá el encuentro. Tampoco estará, eso sí, Rubén López, quien hace quince días participó con el filial tras haber viajado de madrugado y llegado esa misma mañana después de jugar con el primer equipo ante el Teruel. No obstante, el centrocampista de Silleda está en la lista de convocados con el primer equipo, que juega a las 19.00 horas en Riazor ante el Arenteiro.

De la pasada convocatoria se cae el juvenil Adrián Guerrero. El coruñés es una de las grandes perlas del equipo que dirige Manuel Pablo y ha tenido minutos en los últimos encuentros con el Fabril. De hecho, fue uno de los agitadores en O Vao para lograr la remontada en los minutos finales que terminó por dar los tres puntos al filial.

A juicio de Óscar Gilsanz, el equipo de Yago Iglesias, su rival de esta mañana, es uno de los mejores conjuntos de la categoría: “Posiblemente es el que, a nivel de movilidades en ataque, a nivel ofensivo sea, sino el mejor, se acerque mucho a serlo. Tiene jugadores de muchísimo nivel, de muchísima calidad individual. Viene con esa rabia seguramente de haber perdido esas opciones el otro día y de tratar de apurar hasta el final las que pueda tener, que en el fútbol, mientras no acabe, existen”.

El entrenador del filial también quiso agradecer a la afición el apoyo que tendrá el equipo en una cita que puede servir para salvar la categoría de manera matemática en la Segunda RFEF: “Lo mejor que hay en este club ahora mismo y siempre es la afición. Siempre responde, sea al primer equipo, el femenino, el equipo B... Siempre que hay partidos importantes y todo el año el seguimiento es espectacular, con lo cual poco se puede decir”.