La Sociedad Pública de Alquiler (SPA) arrancó en 2005 como uno de los proyectos estrella del Ministerio de Vivienda para dinamizar y revitalizar el mercado del alquiler actuando como intermediaria entre los propietarios y los inquilinos. Su objetivo era alcanzar los 25.000 contratos a finales de 2009. Hasta el pasado mes de julio sólo había logrado 10.627, de los que 400 se han realizado en Galicia.

Esta iniciativa comenzó en la comunidad gallega en octubre de 2005 cuando la ministra de Vivienda, María Antonia Trujillo, realizó una visita oficial a Galicia donde firmó el protocolo de la sociedad, junto al presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño.

La actual ministra de Vivienda, Beatriz Corredor, acaba de anunciar que la SPA hará balance de sus resultados en 2010 y definirá sus prioridades a partir de esa fecha, con lo que la entidad seguirá abierta pese a las duras críticas que está recibiendo. El pasado 9 de junio, la Comisión de Vivienda del Congreso de los Diputados aprobó una proposición no de ley, con el único voto en contra del grupo socialista, por la que se instaba al Gobierno a disolver y liquidar la Sociedad Pública de Alquiler. Esta agencia se creó con un capital social inicial de 20 millones y a cierre de 2008 las pérdidas acumuladas ascendían a 21 millones. El plazo de duración inicialmente previsto para la SPA es de diez años.

Muchas son las condiciones que pone el ministerio y que dificultan que esta sociedad haya despegado. Una de ellas es la actualización de la renta. En el caso de Galicia, desde que comenzó a ser operativa a finales de 2005 hasta ahora, la sociedad pública ha elevado las rentas que perciben los dueños por alquilar sus viviendas en un 8,7%, la mitad (15,8%) de lo que se ha incrementado el mercado en este tiempo en la comunidad, según datos de la sociedad.

Tampoco les llama la atención a los propietarios gallegos el recorte que deben tener sus rentas si se apuntan a la entidad. De media, reciben un 24,2% menos del precio del mercado. En 2005 era del 19,5%. En euros, la diferencia entre si alquilan su casa mediante la SPA o no es en 2009 de 119 euros. En 2005 era de 128. Por su parte, un inquilino gallego obtiene un ahorro medio del 11,4%, dos puntos por debajo de la media nacional. Las viviendas gestionadas por la SPA en Galicia tienen una superficie media de 77,2 metros cuadrados y son de dos a tres habitaciones.

La última propuesta del ministerio que también va a provocar que más propietarios no opten por alquilar sus pisos mediante la SPA es que ésta ya no pagará la renta a los dueños mientras sus viviendas estén desocupadas. Desde su nacimiento, la condición estrella que animaba a muchos dueños era que la sociedad garantizaba a los caseros cinco años de renta para cubrir los posibles periodos de desocupación de las casas. Desde enero, ninguno de los contratos formalizados incluye ya esta garantía. El nuevo alquiler, no obstante, mantiene las mismas coberturas en cuanto a los perjuicios que podría ocasionar el inquilino al inmueble.