Banco Sabadell ganó más de 708 millones de euros el año pasado, un 90,6% más que en 2014, impulsado por la aportación del banco británico TSB Banking Group, que integró en su negocio el pasado mes de junio. El beneficio neto atribuido del banco catalán sin TSB se sitúa en 586,4 millones, lo que supone un alza en términos comparables frente a 2014 del 57,8%, según los resultados remitidos ayer a la Comisión Nacional del Mercado de Valores.

El margen de intereses del Sabadell mejoró un 41,7% en 2015, hasta los 3.202,8 millones, y la morosidad descendió al 7,79%, aunque sin el efecto TSB se situaría en el 9,86%.

El presidente de la entidad catalana, Josep Oliu, aseguró durante la presentación de resultados que la incertidumbre política que se vive en España por las dificultades para conformar gobierno no están perjudicando económicamente al país. "Lo peor que podría pasar es que hubiera unas nuevas elecciones", sentenció.

El directivo del Sabadell descartó además que el banco tenga previsto acometer nuevas fusiones en España o en el exterior a corto plazo: "No estamos analizando ninguna fusión", aseveró Oliu.

La entidad, propietaria de Sabadell Gallego, sumó 25.000 nuevos clientes en la comunidad en 2015.