Los coruñeses parecen ser los gallegos a los que menos les preocupa su jubilación pese a la incertidumbre sobre el futuro del sistema público de pensiones y a las continuas retiradas de recursos del Fondo de Reserva de la Seguridad Social por parte del Gobierno ante la insuficiencia de los ingresos por cotizaciones sociales para el pago de las pagas extras a los jubilados. El número de personas de la provincia de A Coruña con productos de ahorro contratados para cuando se retiren descendió el año pasado un 1,6%, al pasar de los 169.815 de 2014 a 167.144, una caída que se trasladó en menor medida (-0,2%) al patrimonio total invertido en la provincia en planes de pensiones privados, que bajó de 1.363 a 1.360 millones. Este descenso no fue superior gracias al alza del 1,3% (106 euros) en la aportación media por partícipe, que pasó de los 8.031 euros de 2014 a los 8.137 euros del pasado ejercicio.
La provincia coruñesa es además la única gallega en la que bajan las personas que invierten en pensiones privadas y también el capital total colocado en estos productos. Una evolución a la baja en ambas cifras que en el conjunto de España solo se da en otras tres provincias (Almería, Murcia y Castellón), según el informe anual sobre inversión en planes de pensiones individuales por comunidades de la Asociación de Instituciones de Inversión Colectiva y Fondos de Pensiones (Inverco).
Las otras tres provincias gallegas, sin embargo, sí registraron aumentos en 2015 en la contratación de productos de ahorro, al igual que en el capital invertido y en la aportación media por partícipe, lo que indica una mayor preocupación de los habitantes de las tres provincias por lograr una jubilación digna.
En Lugo, las personas que tienen contratado un plan de pensiones pasaron de 50.303 en 2014 a 51.109 el año pasado, un 1,6% más, mientras que el patrimonio total invertido en la provincia subió desde los 351,4 millones hasta los 380,7 millones, un repunte del 8%. Estas cifras revelan que la inversión media por partícipe aumentó en 463 euros, un 6,6%, al pasar de 6.986 euros de media a casi 7.450 euros.
La evolución en Ourense es similar en cuanto a personas con planes privados, pero levemente inferior en lo que se refiere al capital colocado. La provincia pasó de 46.960 beneficiarios de estos productos en 2014 a 47.721 el año pasado (+1,6%) y de 346 millones invertidos a 358,8 millones, un 3,7% más. Mientras, la aportación media repuntó un 2%, con 151 euros más, de 7.368 euros a 7.519.
En el caso de Pontevedra, las personas con pensiones privadas contratadas aumentaron un 1,3% el año pasado, hasta las 154.610, mientras que la inversión total subió un 9,6%, hasta rozar los 1.170 millones. La cuantía media colocada por los pontevedreses en estos productos se incrementó un 8%, en 577 euros, al pasar de los 6.989 euros de 2014 a los 7.566 euros del año pasado. Con este repunte, Pontevedra se coloca como la segunda provincia gallega con mayor inversión por partícipe en planes de pensiones, por detrás de A Coruña (con 8.137 euros) y por delante de Ourense (7.519) y Lugo (7.449).
El balance en el conjunto de Galicia es de 420.584 productos de ahorro contratados para la jubilación, un 0,2% más que en 2014, y un patrimonio invertido de 3.270 millones, un 4,5% más como consecuencia del repunte en el capital medio colocado en las pensiones privadas, que subió un 4%, al pasar de 7.453 euros en 2014 a 7.774 euros el año pasado.
Otro dato que apunta a una menor preocupación de los coruñeses por su futura prestación de jubilación es la proporción de la población que invierte en planes privados. Según el informe de Inverco, en A Coruña solo el 14,8% de los habitantes tiene contratado este tipo de productos, frente al 15% de Ourense, el 15,1% de Lugo y el 16,3% de Pontevedra. La media gallega, por su parte, se sitúa en el 15,4%, casi tres puntos superior a la de 2013, del 12,7%.
Por tipos de planes contratados, algo más de la mitad (el 56,4%) de los coruñeses opta por productos con alguna exposición a mercados de renta variable: el 47,2% del patrimonio está en fondos mixtos y el 9,2% en renta variable. Mientras, el restante 43,6% recurre a opciones más conservadoras, como los planes de renta fija (22,4%) y los garantizados (21,1%), que incluyen también los fondos de rentabilidad objetivo.
En el conjunto del Estado, los ciudadanos que invierten en planes de ahorro para mejorar su jubilación subieron levemente en 2015, un 0,3%, hasta los 7.877.161, mientras que el patrimonio colocado en productos de este tipo subió un 6%, hasta superar los 68.000 millones, como consecuencia de un alza del 5,7% en el capital invertido por partícipe, que pasó de los 8.169 euros de 2014 a los 8.635 del pasado ejercicio, 466 euros más.
Por provincias, solo en Almería, Murcia y Castellón, además de A Coruña, descienden tanto el número de planes de pensiones privados contratados como el patrimonio colocado en ellos. En otras 17 provincias españolas baja la nómina de personas que tienen productos de ahorro de cara a la jubilación, pero sube el capital total invertido en ellos al registrarse un incremento de la cuantía media colocada en ellos.
La provincia española con más recursos asignados a planes de pensiones es Madrid, con un patrimonio invertido de 15.542 millones de euros, el 22,8% del total, seguida de Barcelona, con 10.923 millones, el 16%. El tercer puesto corresponde a Valencia, ya a mucha distancia, con 3.228 millones, el 4,7% del total, mientras que A Coruña aparece en la posición número 11, con esos 1.360 millones, el 2% de la inversión en el conjunto de España.
