La CIG eligió ayer al coruñés Paulo Carril nuevo secretario xeral, tras lograr el 96% de los apoyos en los comicios realizados por el sindicato para elegir a los miembros de su dirección. La nueva Secretaría Xeral recibió 511 votos a favor (96%), 17 en blanco y 3 nulos, con lo que se renueva la mitad, al ser relevadas 6 de las 12 personas que la componen más el secretario xeral.

De este modo, Carril sucede a Suxo Seixo, que ocupó el cargo durante 16 años. Ante el relevo generacional en la CIG, Carril calificó de "reto titánico" el trabajo que tienen ante sí los nuevos miembros electos de la CIG al tener que hacer frente "al retroceso de derechos laborales, de las condiciones de vida y el intento de dilapidar el futuro de la clase trabajadora gallega". Carril lamentó la "situación de empobrecimiento y precarización laboral" actual y culpó de ello "a las políticas del Gobierno del PP".

"Hacer a la CIG más fuerte significa que en los centros de trabajo haya más capacidad de hacer frente a los abusos de la patronal", dijo Carril. El nuevo líder de la CIG afirmó que hubo "una actualización" de las reivindicaciones del sindicato para "acabar con esta situación de explotación y desempleo".