La ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, anunció ayer que el Gobierno eliminará el llamado impuesto al sol, que grava el desarrollo de la energía solar fotovoltaica y el autoconsumo en España, antes de que acabe el año mediante un anteproyecto de ley. Según avanzó en el pleno del Senado, esta medida forma parte de una de las prioridades del Gobierno y, pese a que en un principio la decisión está respaldada por todos los grupos parlamentarios, a excepción del PP, que introdujo el impuesto, también ha tenido en cuenta un plan B.

Se trataría de sacar adelante un real decreto en diciembre que permita el acceso al autoconsumo, ya que, para Ribera, este impuesto solo supone una "traba absurda" para no autoconsumir energía, además de que va unido a una recaudación "ridícula que no tiene ningún sentido". La ministra añadió que prevé facilitar que este consumo se comparta en el ámbito urbano y doméstico.