El Gobierno prepara cambios en el modelo del contrato relevo para beneficiar exclusivamente al sector industrial. La medida, que podría ser llevada esta misma semana al Consejo de Ministros, se espera que entre en vigor el 1 de enero y que esté vigente hasta finales de 2022, según precisaron fuentes sindicales. De este asunto están pendientes algunas de las grandes industrias asentadas en Galicia.

El cambio llega después de una fuerte presión de los sindicatos, que consideraban necesario aflojar parte del ajuste que se había realizado en 2011, cuando el Ejecutivo introdujo modificaciones en la ley de Pensiones para tratar de rebajar los incentivos a las jubilaciones parciales acompañadas de los contratos de relevo. El Gobierno solo atenderá de forma parcial esas exigencias.

Limitará esas prejubilaciones a la industria y, dentro de ese sector, a los trabajos que estén más ligados a la cadena de producción o tareas en las que se requiera una elevada exigencia física. Quedarán excluidos, por lo tanto, aquellos que trabajen en tareas administrativas.

La edad para poder acogerse a la jubilación parcial vinculada a esos contratos relevo se fijará en 61 años, y será necesario acreditar 33 años de cotización y una antigüedad mínima de 6 años en la compañía, según indicaron los sindicatos. Este mecanismo permitirá a los trabajadores cobrar el 100% de la jubilación, aunque inicialmente deberán trabajar un tiempo equivalente al 25% de la jornada que se espera que se pueda acumular al principio.

El impulso de esta medida ha creado malestar entre los empresarios y representantes sindicales de otros sectores que reclaman la extensión de esta fórmula de rejuvenecer las plantillas a todas las empresas.