La Central Intersindical Galega (CIG), el sindicato mayoritario en la fábrica de Ferroatlántica en Cee, ha organizado hoy una manifestación para denunciar el "desabastecimiento de materias primas" en la factoría, la decisión de la empresa de paralizar los hornos 13 y 14 y la amenaza de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE).

"Es la primera movilización, pero habrá más si Ferroatlántica formaliza el ERE o no detiene estas actuaciones para justificar el desmantelamiento de las fábricas", ha anunciado en declaraciones a la prensa el secretario general de la CIG, Paulo Carril.

En este sentido, Carril ha destacado que la paralización de los hornos "supone un nuevo intento por parte de Ferroatlántica para deslocalizar la producción"Ferroatlántica y está dando lugar, de facto, a "un recorte del cuadro de personal antes de que haya siquiera un ERE", ya que supone el cese de actividad de los trabajadores auxiliares y el despido de los eventuales.

Aunque la motivación que la empresa trasladó a los trabajadores para el ERE fue el mal resultado en la última puja de interrumpibilidad, el líder de la central nacionalista ha apuntado que es "una simple justificación para cesar la actividad", ya que "a Villar Mir sólo le interesa el negocio de las centrales hidroeléctricas".

De este modo, Carril ha exigido al Gobierno central que fiscalice y paralice cualquier compensación para Ferroatlántica de las recogidas en el Real Decreto 20/2018, en el conocido como estatuto del consumidor electrointensivo, ya que "estaría incumpliendo la condición de mantener la actividad" que va ligada a estas ayudas.

El sindicato nacionalista también ha llamado la atención sobre el hecho de que la empresa esté cargando para trasladar a Francia los minerales necesarios para el proceso productivo, por lo que, "aunque ya ha habido EREs en Cee", esta vez la situación "es todavía más grave".

"Es la primera vez en la historia que se toma una medida en este tipo; no estamos ante un ERE habitual, como los que ya ha habido en esta fábrica, sino que hay un proceso de desmantelamiento evidente", ha concluido Carril.

Un ERE en la central afectaría tanto a los casi 300 trabajadores que componen el cuadro de personal como a los empleados auxiliares y eventuales, lo que supondría cerca de 400 empleos directos, ha concluido.