La industria textil española desacelera su crecimiento, tanto en la producción como en ventas y número de ocupados, en un contexto de fuerte competencia internacional, según un informe de la financiera Cesce a partir de datos oficiales. En 2018, las ventas del comercio textil disminuyeron un 2,27 % hasta los 17.686 millones, y las cadenas especializadas concentraron el 34 % del valor total. Respecto al empleo, en 2018 el número de ocupados en la industria del textil, la confección y el calzado fue de 157.500 personas, lo que arroja una caída del 11,4%, primer año que cierra en negativo desde 2013, según datos de la Encuesta de Población Activa. Por exportaciones, España ocupa el quinto lugar en Europa y la industria de la moda tiene un peso del 2,9% en el PIB nacional, con el 4,3% del empleo. La moda aporta el 8,8% a las exportaciones españolas, pero su crecimiento se está frenando. Cesce destaca asimismo el cambio de hábitos de los consumidores, con una fuerte polarización de las marcas y donde las ventas de moda a través de redes telemáticas suponen ya el 7,4% de la facturación del sector.