Ni la locomotora europea se libra del gran mal del que tanto se quejan los empresarios en España. La canciller alemana advierte del riesgo de una fuga de empresas si el país no logra atraer mano de obra cualificada tanto de estados miembros de la UE como de terceros países. Si hace 15 años el problema era un desempleo de cinco millones de personas, en la actualidad Alemania no cuenta con suficiente mano de obra cualificada, no sólo en el ámbito académico sino también en las profesiones "prácticas", destacó Ángela Merkel a través un vídeo difundido ayer. "Hay muchos trabajadores manuales y empresas que buscan desesperadamente mano de obra cualificada," señaló la canciller, que advirtió que si Alemania no se esfuerza en este sentido, "las empresas tendrán que emigrar, y eso es algo que por supuesto no queremos".

La estrategia del Gobierno, según Merkel, pasa en primer lugar por agotar el potencial doméstico, fomentando el acceso a una adecuada formación profesional. También se estudia cómo mejorar las condiciones laborales para sumar más trabajadores a los 2,5 millones de ciudadanos de la UE que ya están empleados en Alemania, pero esto, según la canciller, "no es suficiente".

Es por ello que mañana parte del gabinete se reunirá en Berlín con diversos agentes sociales para debatir la Ley de Inmigración de Mano de Obra Cualificada, acordada como parte del contrato de coalición entre conservadores y socialdemócratas.