Los impagos de los créditos COVID con aval del ICO suben a un contenido 2,3%

El Estado ha abonado a la banca 701 millones de euros al asumir entre el 60 y el 80% de las pérdidas de los préstamos de la crisis sanitaria | Las entidades han pagado 1.925,79 millones de euros al banco público como remuneración

Pablo Allendesalazar

Cuatro años después del estallido de la pandemia de COVID, los créditos bancarios con aval público del ICO creados por el Gobierno para evitar una debacle masiva de empresas, pymes y autónomos por la crisis sanitaria siguen mostrando un comportamiento más positivo del que hubiera sido esperable cuando se decretó el confinamiento en el año 2020, pero también registrando un previsto y progresivo deterioro. A cierre del pasado septiembre, la morosidad de estos préstamos —más de 90 días de impago— había subido desde el 1,67% de enero (2.346,3 millones de euros en situación de impago) y el 2,004% de abril (2.815,5 millones) al 2,3% (3.231 millones, un 38% y un 15% más, respectivamente), según un informe al que ha tenido acceso este diario del Instituto de Crédito Oficial (ICO), el banco público que tienen ahora por delante el reto de desplegar unos 40.000 millones de euros de préstamos europeos.

Dichos impagos han llevado al Estado a abonar a la banca 701 millones de euros (180 millones y un 34,5% más que en abril), en virtud de las garantías que concedió para lograr que la financiación siguiese llegando a la economía en las primeras fases del coronavirus. El Estado, así, se comprometió a asumir el 80% de las pérdidas que causaran a los bancos los créditos morosos a autónomos y pymes y entre el 60% y el 70% en los préstamos impagados a empresas de mayor tamaño. La cantidad desembolsada es todavía baja porque la morosidad está siendo contenida, y también porque el ICO va abonando a las entidades el monto avalado de las cuotas impagadas, no de todo el capital pendiente del crédito, ante la posibilidad de que el cliente vuelva a ser capaz de hacer frente a las cuotas. Paralelamente, las entidades han abonado al ICO 1.925,79 millones como remuneración por haber recibido los avales (204,5 millones y un 12% más que en abril). El saldo, por tanto, sigue siendo positivo para el Estado, si bien en algún momento es probable que se dé la vuelta dado el montante de los créditos en impago, que además es esperable que vaya creciendo a medida que los clientes en situación más delicada tengan más problemas para afrontar las cuotas. Además, el saldo de créditos avalados sobre el que las entidades pagan la comisión al Estado se va reduciendo a medida que los clientes van amortizando los préstamos.

El número de operaciones morosas asciende a 55.439 (frente a las 48.034 de abril), concedidas a 38.781 autónomos, pymes y empresas (34.135 en el anterior informe). Dichos créditos impagados comparan con los 1.192.484 que se concedieron, con 674.922 beneficiarios que recibieron 140.737 millones de euros (de ellos, unos 107.000 millones avalados). Que las operaciones impagadas (4,6% del total) sean mayores que el montante en mora (2,3%) implica que los clientes que pidieron cantidades más pequeñas —normalmente autónomos y pymes— están teniendo más problemas para hacer frente a las cuotas.