El desacuerdo económico con Mauritania bloquea la renovación del pacto pesquero

La flota pesquera vivió ayer una nueva jornada de malas noticias y es que solo 24 horas después de que el Parlamento Europeo vetara la prórroga del acuerdo pesquero con Marruecos, desde Mauritania llegaba la confirmación del fracaso de la quinta ronda de negociaciones entre la UE y el país africano para renovar su acuerdo de pesca, que expira el próximo mes de julio y que es en este momento el de mayor importancia de la UE. En Mauritania, y en virtud del pacto aún en vigor, faenan 24 buques cefalopoderos gallegos de los 32 comunitarios de esa modalidad autorizados en el caladero además de dos merluceros, también gallegos. El pacto actual también concede licencia a 25 marisqueros congeladores andaluces, cañeros canarios y embarcaciones pelágicas y palangreras, hasta sumar 110 licencias para la flota de la UE, en su mayor parte españoles.

Las negociaciones para la renovación del acuerdo se rompieron ayer en Nuakchot al no llegarse a un acuerdo sobre la compensación económica a pagar al estado mauritano. El consejero del ministerio mauritano de Pescas, Sheij uld Ahmed, indicó a Efe que, tras tres días de discusiones, no fue posible el consenso ni siquiera para establecer una próxima reunión por lo que el acuerdo expirará en julio.

Durante tres días, una delegación europea negoció con representantes mauritanos y tras llegar a un acuerdo en la parte técnica, las negociaciones quedaron bloqueadas en la parte financiera. "La oferta europea está muy por debajo de nuestras expectativas", dijo el ministro, sin más precisiones.

Las partes chocaron en la parte financiera y se separaron sin llegar a fijar una nueva fecha de negociaciones, aunque quedan todavía seis meses hasta que expire el acuerdo.

El gerente de la Asociación Nacional de Buques Cefalopoderos, José Ramón Fontán, siguió las negociaciones en Mauritania y se mostró tranquilo ante el fracaso en la última reunión al señalar que "ya sabía antes de venir que aún queda mucho por delante, supongo que un par de rondas más y que hasta mayo no habrá solución".

Fontán ve el acuerdo "muy verde" y cuestionó que la UE iniciara tan pronto las negociaciones con Mauritania, "cuando se sabe que hasta el final no se logrará nada".

"Puede servir de precedente". Así describieron ayer los armadores gallegos el veto del Parlamento Europeo a la prórroga del acuerdo pesquero entre la UE y Marruecos el pasado miércoles y que obligó a los 70 barcos españoles que operaban en el caladero -andaluces y canarios- a abandonar precipitadamente aquellas aguas por orden de las autoridades marroquíes. La flota expresó su temor a que la potestad actual de la Eurocámara para adoptar este tipo decisiones pueda afectar en el futuro a la renovación de acuerdos como el de Mauritania u otros y señaló que "es necesario concienciar a los europarlamentarios de la importancia de las decisiones que adoptan para regiones tan altamente dependientes de la pesca, como Galicia".

Del centenar de licencias que el acuerdo pesquero con Marruecos otorgaba a la flota española, a buques gallegos correspondían 17, fundamentalmente arrastreros y palangreros de la localidad coruñesa de Ribeira. Estos barcos, sin embargo, no usaban los permisos por las "excesivas complicaciones técnicas, que impedían la rentabilidad".