La guerra de Ucrania ha golpeado los mercados internacionales de materias primas, energías y alimentos, amenazando incluso con un paso atrás en la globalización comercial. El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, alertó ayer que la economía europea puede ser “particularmente vulnerable a un proceso de desglobalización, que puede estar empezando a tener lugar”, acelerado por la guerra.
De Cos participó también en el IV Foro La Toja-Vínculo Atlántico precisamente en una mesa redonda sobre el futuro de la globalización, con un discurso en el que, a pesar de las dificultades, pidió no ceder al pesimismo. “La UE es una economía muy abierta. De esto nos hemos beneficiado durante muchos años”, apuntó señalando precisamente que “más Europa” puede ser la receta contra ese peso atrás en las relaciones globales, informa Efe.
“Europa se enfrenta al doble riesgo proveniente de una elevada integración en las cadenas globales de valor y, al mismo tiempo, de esa elevada dependencia en determinadas importaciones y exportaciones, inversiones financieras e infraestructuras de pago”, radiografió el gobernador del Banco de España.
Entre los retos más urgentes, señaló como “absolutamente indispensable” la necesidad de avanzar en la ampliación de los mecanismos públicos y privados de “compartición” de riesgos. “Esto me parece que es absolutamente fundamental. Lo era ya antes de la pandemia. Lo era antes de la guerra de Ucrania. Y todos sabemos qué está detrás de este concepto tan complejo”, sostuvo.
“Europa no tiene un mecanismo de estabilización macroeconómica común, y es imprescindible contar con él para hacer frente a shocks de carácter común, pero también a los asimétricos”, indicó antes de apostar por avanzar en la “construcción” de la unión de los mercados de capitales, pues el retraso en ello condiciona la inversión en innovación, tecnología y áreas de mayor crecimiento potencial y dimensión estratégica, que determinarán el lugar de la Unión Europea en el futuro en un mundo que cambia a gran velocidad.
