Las multas a buses escolares repuntan un 15% en Galicia y son la cuarta parte de toda España

La DGT está en alerta por el aumento de irregularidades administrativas, los consumos de drogas, el exceso de velocidad o los desplazamientos sin cinturón de seguridad detectados en los autobuses de transporte escolar. En estos vehículos se desplazan a diario más de 90.000 menores en Galicia para acudir a diario al colegio y nueve de cada diez alumnos los utilizan a lo largo del curso para excursiones o actividades deportivas. Con el objetivo de controlar que la flota tiene la documentación en regla y los conductores no ponen en peligro al colectivo vulnerable que trasladan cada día a los centros escolares y a sus domicilios, Tráfico puso en marcha una nueva campaña. Los resultados han encendido las alarmas: el porcentaje de autobuses denunciados en la comunidad aumentó 15 puntos respecto a la campaña de hace seis meses —66% frente al 51,2% del pasado mes de diciembre— y está 20 puntos por encima de la tasa infractora registrada en el conjunto del país —45%—.

Fueron una media de 60 autobuses escolares denunciados cada día en las carreteras gallegas y más de 100 denuncias, según datos de la Jefatura de Tráfico de A Coruña desde donde se coordinan todos los centros territoriales de la comunidad. La campaña especial de vigilancia sobre este tipo de vehículos se realizó entre el lunes 22 de mayo y el viernes 26.

En el dispositivo especial se controlaron en Galicia un total de 474 buses escolares, el 13% de todo el país (3.576), que derivaron en 529 denuncias en la comunidad gallega a un total de 314 vehículos. Esto quiere decir que hubo chóferes que se fueron con varios expedientes sancionadores en la guantera. El balance de esta campaña en Galicia ha llevado a la DGT a marcar en rojo a la comunidad, ya que pese a sumar el 13% de los controles realizados en el conjunto del país concentra casi el 20% de los vehículos sancionados (1.622 en España) y las denuncias interpuestas (2009). En ambos casos, advierte Tráfico, se trata de un porcentaje superior a los registrados en las últimas campañas, que en el caso Galicia es todavía mayor.

Provincias

De las cuatro provincias gallegas, A Coruña presenta la tasa infractora más alta de la comunidad, un 84,3% -162 autobuses escolares denunciados de los 192 inspeccionados-, seguida de Pontevedra, con un 71%, aunque con una cifra de expedientes muy inferior (60 de 84 controlados). Cierran la tabla, por debajo de la media autonómica, Lugo, con un 55% (71 sanciones de 128 buses vigilados) y Ourense, con un 30% (21 de 70).

Como viene siendo habitual en este tipo de operativos de vigilancia, las irregularidades administrativas concentran el mayor número de denuncias. En el conjunto del país fueron 825 por no disponer de la autorización especial para realizar el transporte escolar, 87 de ellas en Galicia, y 423 por no tener suscrito un seguro de responsabilidad ilimitada, tal y como exige la ley, de las que los vehículos controlados en la comunidad sumaron 84 expedientes.

Durante este dispositivo ningún conductor dio positivo en los controles de alcohol en la red viaria española, pero fueron 14 los que sí revelaron consumo a otras drogas y cinco fueron expedientados por incumplir los límites de velocidad. En cuanto al uso del cinturón, en 52 se constató que los vehículos disponían de los sistemas de retención, pero no hacían uso de ellos por presentar anomalías en su funcionamiento; una cifra que, aun siendo pequeña en el total e los vehículos controlados, —destaca la DGT— ha crecido un 1,6% respecto a la última campaña. Además, 41 conductores fueron denunciados en el cojunto del país por no llevar a bordo del autocar una persona encargada del cuidado de los menores cuando así procedía y otros 24 por exceso de tiempo de conducción o minoración del descanso.

En lo que se refiere a la señalización obligatoria que deben llevar este tipo de vehículos, 189 de los buses controlados no llevaban la correspondiente señal V-10 de transporte escolar “ —54 en la comunidad gallega—, un porcentaje que también ha crecido tres puntos respecto a la campaña de hace seis meses. En la comunidad gallega, se interpusieron además 12 denuncias por deficiencias en las puertas de servicio y emergencia.

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