Más de seis horas atrapados en tren tras el atropello en Lalín: “La gestión fue un desastre”

El viaje de regreso a casa en tren el domingo por la tarde se convirtió en un auténtico “caos” para cientos de pasajeros. El atropello mortal por un convoy de una persona en un punto de paso no autorizado en Lalín sobre las 18.30 horas provocó la suspensión de siete servicios de larga distancia, en los Alvia que unen Galicia y Madrid —en ambos sentidos—, según informaron ayer desde Renfe. Hasta que la Policía Judicial ordenó la reapertura de la línea los trenes que tenían que pasar por ese punto, cientos de pasajeros se vieron afectados con retrasos de más de seis horas en su llegada a destino. Afectados consultados por este periódico se quejan de la gestión derivada de esta “situación dramática”, como es el arrollamiento de una persona. “Vivimos una situación caótica; la gestión fue un desastre”, cuestiona una usuaria de la conexión Oursense-A Coruña de las siete de la tarde. “Lo que nos dijeron nada más subir al tren que se iba a solucionar en media hora o una hora, se eternizó hasta bien entrada la madrugada”, detalla una pasajera.

A medida que pasaba el tiempo, en los vagones los nervios y la desesperación iban a más. “Hubo pasajeros que optaron por coger un coche de alquiler; incluso hubo una madre que vino a recoger a su hija, y a medida que pasaron las horas las familias que venían con niños también se buscaron medios alternativos”, relata una afectada, que finalmente pasadas las 00.30 horas decidió pasar la noche en Ourense, ya que su madre reside en la ciudad. “Era la 01.30 horas —detalla— y todavía el tren no había salido de Ourense, se había restablecido ya la circulación, pero aún estaban a la espera de un maquinista para emprender el viaje”

Los pasajeros reconocen que una situación así es un imprevisto, pero echan en falta información sobre la evolución de los acontecimientos. Ya que, aseguran, si superan que se iba a demorar hasta pasada la madrugada, hubieran abandonado los trenes.

Desde Renfe, atribuyen los retrasos ocurridos en la circulación el domingo a una “incidencia ajena” y recuerdan a los pasajeros afectados que pueden presentar una reclamación para que les sea abonado el importe correspondiente por la demora en la llegada a sus destinos.

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