El jurado declara culpable de homicidio al hombre acusado de matar a un vecino de Toques

Su primo, también procesado, fue declarado no culpable del delito de daños y del de encubrimiento

Momento de la celebración del juicio.   | // CABALAR

Momento de la celebración del juicio. | // CABALAR / Redacción / Agencias

Redacción / Agencias

El jurado declaró ayer culpable de homicidio y daños a uno de los dos hermanos acusados de matar en 2019 a un vecino de Toques (A Coruña) y de quemar su cadáver, mientras que ha exculpado a su primo, el otro procesado. El jurado consideró que el principal acusado es culpable de homicidio y de daños, mientras que su primo ha sido declarado no culpable tanto del delito de daños como del de encubrimiento. Otro hermano, también acusado inicialmente por esta causa, fue absuelto el lunes al no incluirlo el magistrado en el objeto del veredicto entregado al jurado por considerar que no existe prueba que pueda fundar una condena.

Durante el juicio, celebrado en Audiencia Provincial de A Coruña, los tres acusados se declararon inocentes. Los dos hermanos alegaron que no vieron a la víctima el día del suceso y que habían atendido el parto de una de sus vacas en dicha jornada, si bien ninguno de los veterinarios de la zona han reconocido tener constancia del mismo.

Mientras, el primo se situó él mismo en el escenario en el que apareció el cadáver, donde, según declaró, uno de los hermanos le confesó que había matado a su vecino y prendió fuego al vehículo y al cuerpo del fallecido en su presencia. Sin embargo, dijo que no había participado en el crimen y que no denunció por “miedo”.

Según los hechos acreditados, el 27 de marzo de 2019 después de las 17,00 horas de la tarde la víctima se encontró con uno de los dos hermanos en las proximidades de la casa de los acusados. A raíz de este encuentro se produjo una discusión que derivó en una pelea en la que la víctima, Julio Lea, recibió tres golpes en la cabeza con un objeto similar a una maza, que le provocaron la muerte. A continuación, el acusado trasladó el vehículo y el cuerpo del fallecido hasta un área forestal del lugar de A Capela, en el término municipal de Toques, y allí le prendió fuego al coche y al cadáver con una garrafa de gasolina.

Este acto provocó un incendio forestal que arrasó 35 hectáreas y que obligó a intervenir a los servicios de extinción de la Xunta, quienes dieron el aviso a la Guardia Civil tras encontrar el cadáver .