Una de las propuestas que el Gobierno local de Arteixo lleva al pleno previsto este jueves es una modificación del presupuesto municipal para incluir 5,5 millones de euros del remanente, entre los que se incluye una partida de 300.000 euros destinada al acondicionamiento de la zona deportiva de la urbanización de Montegolf, en A Zapateira. El alcalde, Carlos Calvelo, confirma que el Ayuntamiento mantiene negociaciones con la que fue la promotora de esta urbanización, que tiene en concesión este local deportivo, Riofisa (firma en concurso de acreedores), para lograr la cesión del complejo deportivo, que cuenta con dos piscinas, pistas de pádel y baloncesto, y un edificio.
El regidor confía en que se pueda alcanzar pronto un acuerdo y afirma que ya hay borrador del convenio para el traspaso del inmueble a propiedad del Ayuntamiento. “Queremos recuperar la zona deportiva y que la gestione el Concello”, asegura el regidor, que también explica que las instalaciones serían para uso disfrute de “todos los vecinos de Arteixo”.
La negociación entre el Ejecutivo local y Riofisa tiene su origen en 640.000 euros que la empresa depositó como anticipo hace dos decenios en virtud de un convenio urbanístico para ejecutar la segunda fase de la urbanización, un proyecto que la crisis económica de 2008 truncó. La firma reclama ahora la devolución de esta cantidad al no haberse cumplido el acuerdo. Ante esta solicitud, el Concello aprovechó para incluir la cesión del complejo deportivo, que fue otorgado por el Concello en una concesión municipal a la empresa, en la negociación, según detalla Calvelo.
La previsión municipal es que la reforma de estas instalaciones deportivas tenga un coste máximo de 300.000 euros, cantidad que se incluye en la partida prevista en el cambio de cuentas que se aprobará este jueves. Los trabajos supondrán el acondicionamiento de este recinto, en el que hay que rehabilitar las dos piscinas, las pistas deportivas y el propio edificio, en el que se habilitarán unos vestuarios. El alcalde también indica que está previsto que el complejo cuente con personal para su gestión, con lo que será necesario sacar a concurso público la concesión o contratar una prestación de servicio.
“De tener un recinto sin uso 20 años pasamos a recuperarlo para ponerlo al servicio de los vecinos de Arteixo”, indica el regidor.
