El declive de polinizadores en todos los continentes pone en riesgo la supervivencia de las especies vegetales, la sostenibilidad de la agricultura y la vida humana. Nueve de cada diez plantas necesitan un insecto para dar frutos y semillas, y se calcula que el 75 % de los alimentos que se producen en todo el mundo dependen de la polinización por insectos.

Ante esta situación, el Jardí Botànic de Barcelona, con el apoyo de las administraciones públicas europea, estatal, autonómica y municipal, ha creado esta exposición con el objetivo de dar a conocer y sensibilizar a la ciudadanía sobre el papel esencial de los polinizadores, en especial, de las abejas silvestres, para garantizar la supervivencia de buena parte de plantas del planeta Tierra. La mayoría de nosotros conocemos las abejas de la miel, pero estas son solo una especie entre otras muchas. En la península Ibérica hay alrededor de un millar de especies de abejas solitarias que no viven en colmenas ni producen miel, pero ellas son las verdaderas protagonistas de la polinización y, también, de esta exposición.

Con un planteamiento museográfico visual y pedagógico con varios niveles de lectura, para llegar tanto al público escolar como al científico, se recrea la vida natural de las abejas para mostrar cómo se da la polinización y cómo se relacionan las flores y estos insectos, así como el papel que juegan en el equilibrio ecológico de la Tierra. A continuación, se repasan las principales causas de la disminución constante de insectos polinizadores: el uso de plaguicidas, la fragmentación y pérdida de hábitat, la contaminación ambiental o el cambio climático.

Se proponen recomendaciones prácticas que cualquier persona puede seguir con el objetivo de cambiar esta situación como, por ejemplo, ejercer un consumo responsable, adornar balcones y terrazas con plantas aromáticas para las especies locales de polinizadores o construir hoteles de abejas, entre otros. La muestra incluye, también, varias iniciativas ambientales promovidas por entidades y asociaciones, y, también, por las administraciones públicas europeas, estatales, autonómicas y locales. Además, el proyecto incluye un programa de actividades dirigido a todos los públicos.