Jordi González se quedó sin una colaboradora hace un mes. Gloria Serra cambió de programa y de cadena. Desde hace una semana presenta 3D por las tardes, el enésimo intento de Antena 3 de plantarle cara al Sálvame de Jorge Javier Vázquez. Ella dice que no marchó huyendo de La noria, sino que hizo el cambio atraída por el nuevo proyecto tan magnífico y bla, bla, bla que le ofrecían. ¿Es cierto que es la fuerza de la gravedad la que atrajo a Serra a 3D en Antena 3, o fue más bien la fuerza centrífuga de La noria la que la lanzó despedida después de tres años dando vueltas en la noche de los sábados?

La fuerza de la gravedad representa la atracción entre masas y su resultado final es experimentar una aceleración (puede que sentados no notemos aceleración por ningún lado, pero si nos dejamos caer por la ventana la cosa cambia). O sea, que según Serra abandonó La noria porque su masa entró en el campo gravitatorio de la masa de 3D y allá que se fue. Pero un resultado similar a la fuerza gravitatoria puede lograrse con un movimiento de rotación, ya que éste produce una aceleración centrífuga con iguales efectos mecánicos. O sea, que los giros semanales de La noria pueden simular la atracción gravitatoria igual que lo hacía hace más de cuarenta años la nave Discovery en 2001: una odisea en el espacio.

En 2001, un astronauta puede estar en microgravedad en el espacio, pero gracias a la gravedad artificial que genera el giro de la Discovery puede correr alrededor de la nave como si fuera un ratón encerrado en una noria. Como hizo Serra por tres años. Si se abriera una escotilla el astronauta saldría lanzado como una piedra en una onda. Como le pasó a Serra estos días. Antes hacía lo que hacía en La noria, ahora cada vez que hago zapping me la encuentro en 3D hablando de cotilleos y del Rocío, del Rocío y de cotilleos. Así es: la aceleración gravitatoria y la centrífuga pueden ser indistinguibles.